Mary Wang

La guía de supervivencia de Eli Pepperjack

ᴋʀᴇʟ

La mayoría de las personas necesitan una alarma para despertarse a tiempo, bueno, ese no era mi caso, quien necesita una alarma cuando tiene una hermana.

— ¡Aja, en nombre de todos los Dioses, apaga esa cosa!— Era la tercera vez que Easy peasy sonaba a todo volumen, escuchándose por toda la casa.

— ¡Lo siento hermanito! esta canción me pone de buen humor.— Aja asomó la cabeza por la puerta de mi habitación por unos segundos, sonrió y salió cantando.

— ¿Te gustaría que yo repitiera El lago de los cisnes tres veces seguidas?— Salí de mi cuarto descalzo y en pijama, fui al cuarto de Aja y quité la canción.

— ¡No deberías entrar a mi cuarto sin tocar!— Aja habló casi en un chillido mientras me sacaba a empujones de su cuarto.

— ¡Cuando dejes de meterte en mi habitación sin permiso tal vez yo toque tu puerta antes de entrar!—

Ésta era una discusión constante entre mi hermana y yo, incluso en Cantalupia.

— ¡Niños ya dejen de discutir! Krel alistate para la escuela, el desayuno esta listo y no queremos que lleguen tarde.— La dulce voz de nuestra tía se escuchó por el pasillo.

Cierto, la escuela. La verdad no tenía ganas de ir, sabía que otra vez sería un día horrible, eso y que me había quedado despierto toda la noche arreglando un asuntito.

La cerradura de mi casillero.

Me había quedado despierto construyendo un dispositivo inalámbrico que activaba internamente el mecanismo de la cerradura sin necesidad de introducir una llave, el dispositivo estaba enlazado con una aplicación en mi teléfono que yo mismo había programado, solo necesitaba introducir un codigo de tres digitos y el dispositivo abriría mi casillero. La tecnología se me daba tan bien como las matemáticas, para mi armar éste tipo de cosas era tan fácil como sumar dos más dos.

Mamá decía que mis inventos me llevarían lejos, mientras que papá decía que mis "juguetes" eran una distracción de mis deberes como príncipe. Suspire intentando alejar los amargos recuerdos de mi mente y regrese a mi cuarto para alistarme e ir a la escuela.

...

Cuando llegamos, todos se voltearon hacia nosotros, bueno, en realidad habían volteado a ver a Aja, todos estaban murmurando su nombre, mi hermana me miró y yo solo me encogí de hombros sin saber que decirle.

— ¡Aja, nena eres viral!— La muchacha de cabello negro y nombre desconocido se acercó con una gran sonrisa en el rostro, detrás de ella venía una chica de piel morena que también traía una gran sonrisa.

— ¿Viral? ¿acaso tengo un virus? ¿me pondrán en aislamiento?— Aja habló preocupada, colocando su mano sobre su frente con la intención de medir su temperatura.

— No, digo que todos están hablando de ti, subí a mi instagram el vídeo del golpe que le diste a Steve ¡Y ya eres popular! Ven, juntate con nosotras.— La pelinegra enlazó su brazo con el de Aja y la arrastró con ella.

Aja se había ido con las chicas, supuse que la vería en clase así que fui directamente a mi casillero a instalar mi cerradura automática.

— Hola Krel.— Me giré para ver quien me estaba hablando, era un chico muy bajito, con lentes y cabello negro. — Probablemente no sepas quien soy así que me presentaré. Eli Pepperjack.— Me tendió su mano y yo se la estreché.

— Krel Tarron, pero eso ya lo sabías ¿no? dime ¿eres un espía? ¿quien te envió? ¿quién más sabe nuestra ubicación?— Sin soltar su mano, hice que el chico girara sobre si mismo, retratándolo contra los casilleros y doblando su brazo en su espalda para que no se soltara de mi agarré.