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ɴᴀʀʀᴀᴅᴏʀ

Las cosas en Cantalupia habían cambiado mucho.
El General Morando, quién había orquestado el ataque al castillo, se había autoproclamado Rey de Cantalupia.
El ejercito patrullaba las calles para hacer cumplir el toque de queda, cualquier persona que estuviera fuera de casa a las diez era castigado.
Cualquier persona que nombrara a la familia Tarron era castigado.
Cualquiera que desobedeciera al nuevo Rey era castigado.
Cualquier cosa era buena para castigar a los Cantalupianos, obligándolos a hacer trabajo forzoso.

Varios hombres y mujeres de Cantalupia habían creado un grupo al que llamaron "La resistencia", ellos tenían la esperanza de que los herederos regresarían a reclamar el trono, pero Morando al ver que los Cantalupianos aún esperaban a los Tarron decidió destrozar la poca esperanza que tenían, así que contrato a la Hermandad Zeron, unos asesinos a sueldo, para que rastrearan a los príncipes y los regresaran a Cantalupia, vivos o muertos.
...

ᴋʀᴇʟ

Al fin era sábado, hoy estaba libre de la tortura escolar y de las preguntas de Eli, de lo que no estaba libre era de Aja, mi hermana estaba emocionada por su "cita" con Steve y estaba volviéndome loco.

— ¿Que debería ponerme? ¿Y si lo arruino? ¿Que tal si quedo como tonta y ya no quiere verme?—

— ¿Cual es el problema hermana? ya has ido a muchas galas reales antes.—

— Esto no es lo mismo, y te recuerdo que me escape de la mayoría de esas galas, no como tú que ibas rompiendo corazones.— Aja comenzó a reír. Desde que dije que me gustaba una chica Aja había comenzado a recordarme a cada niña de Cantalupia con la había tenido un mínimo contacto.

— Primero: que haya bailado con un par de chicas no me convierte en un rompecorazones— Empujé a Aja y la obligué a pararse frente al espejo. — Y segundo: no tienes porque preocuparte Aja, solo mirate...— Ella fijó su mirada en el reflejo. — Eres muy bonita, ágil e inteligente, es lógico que le gustes a Steve.—

— Creí que él no te agradaba.—

— No me agrada, pero a ti sí.—

— Sabes hermanito, a veces eres muy sentimental.— sonrió.

— Si, como sea, ahora sal de mi cuarto.— Tomé a Aja por los hombros y la empuje hasta sacarla de la habitación.

— ¡Espera! ¿Y tu que harás?—

— ¿Que haré? no lo sé, no tengo planes.— Moví la mano restándole importancia al asunto, sí, sería aburrido estar solo toda la tarde, pero nada que una buena canción no pueda solucionar.

— Le marcaré a Eli para que venga a pasar el rato contigo.— Aja dio media vuelta y se fue.

— ¡Oye no, no hagas eso!— Obviamente Aja me había ignorado olímpicamente.

...

ɴᴀʀʀᴀᴅᴏʀ

El reloj marcó las siete.

— ¡Aw! Lucy, nuestra princesa tiene su primera fiesta.— Ricky sacó una cámara instantánea y le tomó una foto a Aja, cegándola con el flash.

— No te pongas nerviosa amorcito.— Lucy abrazó a Aja por los hombros.

— No estoy nerviosa ¿tu que sabes de nervios?— Aja se quejó, claramente estaba nerviosa, ella nunca había tenido una cita con alguien.

Lucy sonrió y Ricky tomó otra foto.

— Esta es para el álbum.—

Krel estaba parado detrás de Ricky, Aja se había estado burlando de su hermano horas antes, ahora era el turno de él de burlarse de su hermana.

Mary WangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora