nasty; m a s h i k y u

-09+¹⁸-

Este capítulo cuenta con contenido +18.
pondré un [tw‼️] justo antes para avisar, solo por si no es de su gusto prefieren saltarlo.

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Junkyu.

Algo en mi me grita que soy un aprovechado, porque la manera en que mi corazón se desborda casa que le tengo cerca, sé que en su organismo nada de estas respuestas químicas sucede. Pero me gusta toda esta nueva experiencia, le da vida a mi aburrida rutina. Mis tardes ya no son silenciosas, ahora puedo escuchar las extrañas experiencias de Mashiho, junto a sus chistes.

—Me gustaría salir hoy también.

—¿Y por qué no?

Técnicamente ya no estoy castigado, y aún me queda algo de dinero. Solo debo mentir.

—Preguntaré.

Salimos de la pequeña biblioteca y volvemos a dividirnos. Camino con timidez, a propósito, y llego hasta donde mi padre se encuentra.

—Hoy iré a comprar nuevos libros.

Me mira, y duele una pizca la desconfianza estampada en su cara, como si toda la vida hubiese sido un criminal.

—¿Irás solo?

—¿No puedo?

Tengo esperanzas de que ceda, quiero creer que lo va a hacer.

—Bien hijo, ¿Necesitas dinero?

Asiento, porque no pierdo nada, y si voy a mentir por lo menos lo haré bien.
Saca unos cuantos billetes de su bolsillo y los envuelve en un papel para dármelos.

—Puedo irte a buscar si quieres.

—No padre, así estoy bien, no demoraré.— Hago una reverencia en agradecimiento, y a pasos lentos me dirijo a la salida, sin poder creer mi victoria. Mashiho me espera, igual que yo, sorprendido.

—Oh dios, ¿Ya no estás castigado?

Pero sigo caminando, con al intención de que me siga. Aún no es seguro hablar. Solo unas cuantas calles más, me apuro a tomar su muñeca mientras río.

—¡No lo sé! Me ha dejado ir a comprar libros, que no es mala idea.

—Conozco una librería cerca, ¿Quieres ir?

En realidad, iría a donde el quisiese.

—Claro.

Caminamos en silencio, pero no quiero soltarle. Me gusta su camiseta de rallas, y su Jean medianamente roto, también sus anillos, y el minimo delineado azul en sus ojos, que resaltan el marrón en ellos.

—¡Es esta! uh, está más cerca de lo que creía.

Conozco esta cadena de librerías, es de mi favoritas, entonces acepto emocionado, tal vez si encuentre algo bueno hoy. Entramos, y Mashiho se dirige sin pensarlo mucho a literatura universal, mientra yo dudo si ir a la juvenil o filosofía moderna. Hay una zona a la que siempre me niego a ir; "Sexualidad" porque no la considero necesaria, pero en estos momentos es lo que más requiero. Camino por los estantes, buscando una respuesta a mis dudas, algo que me recuerde que todo lo que estoy sintiendo y descubriendo es natural, aceptado.

—¿Qué buscas?

La voz de mi nuevo amigo logra que de más labios se escape un respingo, cosa que a él le hace gracia.