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Molesto.

Estaba muy molesto, se supone que en dos días pronto se podría ir y regresar con sus amigos. ¡Pero no! ¡No! Llegó una invasora y le daño su patita, ahora no podía caminar, debía quedarse en esa casa con perros otras semanas. (y aunque no lo admitiera, estaba feliz por eso)

~ Mira Sunggie, te traje frutas - la voz del alfa llegó a sus diminutas orejas causándole molestia.

Es culpa de ese alfa coqueto.

~ Hannie, lo siento... Yo no quería que te dañes tu patita. - la misma voz sonó con lastima.

MinHo también estaba molesto, apenas logró tener a su ardilla en manos gruñó a los otros dos omegas para que salgan de su hogar mientras el resto del día atendía con mucho cuidado al omega lastimado, pero el pequeño estaba molesto también con él, porque dejó que esa omega entre y le dañe su patita.

~ Al menos come... Asi mejorarás pronto.

Si... Sería difícil que ese roedor rencoroso lo perdone.

MinHo sonrió cuando con pereza el menor tomó entre sus pequeñas patitas la fruta picada que le ofrecieron, y con cuidado tomo a la ardilla en su manos acariciando su pancita mientras JiSung comía gustoso.

~ Te agrada Minnie, ¿no es así? - habló al menor- Te mostraste ante él, significa que te sientes confiado con él.

Una culpa invadió el corazón del menor, porque MinHo lo había cuidado aún cuando no debía... Y lo seguía haciendo, pero no, por favor no piensen mal... Confiaba mucho en el alfa, solo se sentía inseguro de si mismo, porque el omega (aunque también quiera negar eso) buscaba impresionarlo. ¿Y si no era lo suficientemente bonito?

~ Está bien, Sunnie... Me alegra que te hayas mostrado a Minnie, a él también le agradas - empezó a reír por las cosquillas que la peluda y larga cola del menor causaba en sus manos.

Y durante unos minutos eso continuó, MinHo hablando y JiSung escuchando mientras comía todo lo que el castaño le ofrecía, y cuando se sintió satisfecho sus negros ojos se cerraron y se dejó llevar por el sueño con la voz de su lobito de fondo.

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~ ¡Gané! ¡Jaque Mate! - gritó eufórico SeungMin al ser la cuarta partida que derrotaba al menor.

MinHo soltó un leve risa negando mientras la ardilla cubría sus orejas por el repentino grito, JiSung bufó y volvió a acomodarse con los ojos cerrados en el regazo del alfa, quien dejó tiernas caricias en el peludo cuerpo marrón.

~ Hyung, necesito dos favores...

~ No quiero salir con Yiren.

~ ¡Eso no! ¡Déjeme terminar! - soltó un suspiró para poder calmarse y seguir hablando- Quiero que me ayude a ver a Changbin hyung...

Mi ardilla. [Minsung] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora