muslos. ||JinNam.

XV

Cuando llegaron a la casa, Seokjin estaba barriendo la cerámica del ante jardín. El pequeño niño, bajó a penas Namjoon le abrió la puerta y se fue corriendo hacia el Kim que le abría los brazos en la entrada.

-¡tío Jin!

Gritó el pequeño, mientras era acogido en los cálidos brazos del mencionado. El pequeño se aferró con todas sus fuerzas, y Namjoon caminó de manera lenta hacia ellos con la mochila en la mano. Cerró la puerta del auto con las llaves una vez que estaba a su lado, riendo al ver como Seokjin debía tomar en brazos al pequeño que no se quería soltar.

Entraron los tres a la casa, entonces el pequeño se despegó para soltar gritos de emoción. Ambos adultos se quedaron de pie mirando como los ojos del niño lucían tan iluminados ante cada paso curioso que daba por la casa.

Seokjin fue quien decidió acercarse al niño, quién solo le miró apuntando por la ventana hacia atrás, donde estaba el pequeño jardín. Jin asintió y el niño se fue corriendo hacia el lugar, a pasos torpes y apurados. Tomó la pelota de plástico que estaba allí, y comenzó a saltar con ella en brazos.

-¡juguetes de colores lindos! ¡están brillando, miren, Nam hyung, Jin hyung!

Namjoon sonrió y fue a la cocina mientras el Kim mayor iba al jardín con el pequeño niño. Nam por su lado tomó una caja de leche de fresas, y dos de chocolate. Fue donde su esposo y su pequeño niño estaban jugando, sonriendo para mostrar las cajitas a ambos que le miraron curiosos.

-¿qué es eso?

preguntó Jihoon caminando hacia Nam. Él adulto le entregó la cajita y el infante la miró por todos lados. "es leche" fue la respuesta, él solo abrió si boca asombrado y con ayuda de Seok puso la bombilla.

-¡no sabía que existían estas leches circulares! ¡o de sabor!

Saltó emocionado, queriendo decir que la pechera era de sabor y en caja. Seokjin no evitó reír, negando.

-cariño, es una leche en caja. en ese caso, sería un rectángulo.

explicó sabiendo que el pequeño posiblemente no sabía de la existencia de figuras 3d aún.

...

- S-seokin...

susurró Namjoon mientras sentía las manos de su esposo bajar por su vientre. Gimió en voz baja cuando rozaron su trasero contra una carne dura tras unos pantalones. Negó y con la mirada apuntó hacia la puerta.

- Tenemos un pequeño ahora...

- Eso jamás será un impedimento, lindo. Sabes que Jihoon es dormilón y después de jugar tanto, no creo...

Los dedos de Seokjin le acariciaron el brazo al moreno, deslizando suavemente desde su muñeca hasta el codo. Empujó con las caderas el cuerpo de su esposo contra el escritorio que tenían en su habitación, haciendo que el chico se queje en voz bajita y dejando salir un jadeo.

—¿entonces, Namjoon?

Preguntó el Kim mayor con la voz ronca. Nam gimió en respuesta, usando siempre su tono de voz bajo y grave como era por naturalidad.

—Si él llega a oír algo, todo será tu culpa Kim Seokjin.

El moreno bajó su pecho para apoyarlo en el escritorio, moviendo la cadera de lado a lado. por su lado Seokjin le tomó las mismas, mirando como novia su trasero, e inevitablemente bajando la vista a sus tonificados músculos en aquella zona tan especial, sus fuertes muslos.

Le dió una nalgada antes de apretarle los mismos.

—madre mía Namjoon, tus muslos.

Susurró el peli negro y el castaño se quejó en voz baja, bajando sus pantalones y ropa interior hasta las rodillas antes de separar sus glúteos.

—Jinnie, trae el lubricante. – dijo el moreno apenado, a lo que Seokjin asintió rápido y embobado con la vista. Casi se tropieza en aquel pequeño recorrido que dio hasta la mesa de noche para poder tomar dos preservativos y lubricante.

Una vez estaba con el moreno nuevamente, una sonrisa demasiado animada apareció en su rostro. Y Namjoon tragó sin esperar lo que venía.

...

—¡Buenos días, papás!

Jihoon entró a la habitación gracias a que Seokjin había ido a asaltar el refrigerador con Namjoon en plena noche, algo que ya era costumbre luego de intimidar.

Subió a la cama con una gran sonrisa, y apretó entre sus pequeñas manitas las mantas con las que sus padres estaban abrigaditos.

Namjoon quien ya estaba despierto sonrió, sobre todo al ser llamado papá. el pequeño no lo hacía muy seguido, bueno en realidad no se quejaba para nada, llevaba un día allí. El peli negro tenía el sueño ligero así que despertó con facilidad al sentir al niño entrar a la habitación, el pequeño se estiró hacia ellos con algo de sueño aún, pero queriendo ser mimado. Nam sonrió y abrió las mantitas para que se meta ahí abajo con ellos, Seokjin volteó hacia ellos y dejaron al pequeño en medio.

—¿te gusta tu habitación, querido Jihoonie? — preguntó de manera amable Jin. Su adorado infante asintió rápidamente, moviendo sus pies con emoción. después se apegó hacia el pecho de papá Jin, aferrando las manos a su ropa.

—¡me encanta! ¡no quiero alejarme de ustedes jamás! — Namjoon sonrió por las palabras y el adverso soltó una risa, tomando las mejillas de su niño. Luego de aquello, ambos adultos se miraron entre ellos. Se acercaron y se abrazaron dejando a su pequeño al medio del abrazo, haciéndolo reír por el calor y lo ahogado que se sentía aquello. —¡papis, me están apretando! ¡papá Nam, papá Jin! ¡estoy aquí! ¿soy invisible?

Namjoon solo pudo reír negando, dando cosquillas a su pequeño niño. Tenían que levantarse de todos modos, les tocaba llevar a su pequeño hijo al control para el chequeo de su enfermedad. Después de besar las frentes de los dos chicos en la cama, Nam se levantó.

Solo llevaba sus boxers y eso hizo que Seokjin llevara su atención a él de inmediato, silbando en forma de halago a su trasero.

—¡muslotes, culazo! — volvió a silbar, riendo luego al ver como el ajeno gruñía mientras iba al baño.

—¡culazo, muslotes papá Namjoon!

Seokjin lo miró asustado. El castaño lo iba a matar.

—

una disculpa por tardar meses en actualizar. la verdad es que sentí que mis historias no tenían apoyo, solo vistas pero jamás votos. de todos modos, sé que tengo lectores fijos y eso me hace muy feliz!! esto va para todos ustedes<3

90 votos para otro capítulo.