douceur 丼 kookmin.

capítulo 46

—¿Sabes, Minnie? Si no fueses tú, probablemente ya hubiese huido a otro país.

Jimin evita comentar algo al respecto. Sabe que Jungkook está en crisis por tener que darle la noticia a su papá alfa y que en esos momentos dirá cualquier cosa para intentar relajarse y no quebrar su poca estabilidad.

Está bien estar asustado de su papá, porque también lo está él.

—¿Jimin mi bebé? —su padre alfa aparece finalmente, caminando tranquilo por su sala hasta apoyarse a su lado y dejar un beso en su frente descubierta—. Y hola, Jungkook.

—Ho-Hola, señor.

Jungkook tartamudeando es una de las cosas más asombrosas que ha visto, pero es también la alarma en su papá alfa.

Taemin observa al chico con mirada crítica, tronando el cuello y tomando asiento solo cuando su omega está cerca de su presencia.

—No sabía que había junta familiar —Taemin intenta bromear, logrando que Jungkook sonría casi a la fuerza.

Sumin lanza una miradita hacia Jimin y sonríe, brindando un poco de tranquilidad a su cachorro por medio del lazo precioso que pronto, Jimin también podrá compartir con su propio cachorrito.

—Es más importante que eso, Tami.

Jimin se sonroja ante la muestra de cariño de sus padres y refuerza el agarre en la mano de su alfa. Él también quiere mostrarse cariñoso.

—Papá...

Taemin deja prestar atención a su omega y sonríe hacia su hijo, asintiendo.

—¿Si, bebé?

Jungkook aprieta los labios, bajando un instante la mirada y suspirando profundo para por fin encontrarse con los curiosos ojos del alfa que le romperá los huesos. Ah, y que será oficialmente su suegro y el futuro abuelo de su cachorro.

—¿Bebé? —Taemin insiste, presintiendo que esa reunión va más allá de lo que se le dijo.

—Pues... verás, papá...

Sumin se apida de ambos jóvenes, recordando que ella también estuvo en esa terrible e incomoda situación hace años.

Realmente espera que su alfa sea igual de comprensivo y que no ignore que él también fue un pobre chico asustado ante sus padres.

—Tami, seremos abuelos.

El silencio que le sigue a su confirmación, es horrible para el pobre Jungkook y el asustadizo Jimin.

Sumin, sin embargo, puede sentir a la perfección la tensión creciendo a través de su lazo de pareja. No es sólo eso, es algo que va más allá y que no puede describir del todo.

Sea lo que sea, se adelanta y sujeta firme el brazo del alfa que ahora mismo parece en trance, pero que pronto estará lo suficiente exaltado como para arrancarle un trozo a Jeon Jungkook.

Porque después de todo...

—¿Qué carajo le hiciste a mi bebé?

Jiminie es el bebé de papá.