extra #3

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Massielle.




Tu hermano es un imbécil, con suerte se salvó de una patada en las bolas.

Suspiré, viendo como ella se maquillaba. –¿Ahora que pasó?

Era gracioso y muy impresionante ver a Hani enojada pero que aún así el maquillaje le saliera perfecto. Vi como cambiaba de brocha, suponía que tenía el teléfono apoyado del espejo porque miraba justo hacia el frente.

Me sorprendió recibir una videollamada de mi amiga tan temprano para ella, aquí ya era de noche, pero luego supe que tenía cosas que hacer de lo contrario aún estuviese durmiendo. También me llamó para quejarse de Tae.

El muy idiota me arruinó la noche. Salí con Chanie, el amigo de JK, fuimos a un bar y...

–Espera, ¿y que paso con...?

Junghwa. –Completó, al darse cuenta que no recordaba el nombre de su "amiga".

–Si, ella.

Mmm. Quería algo serio y bueno, yo no obviamente.

–Oh... continúa.

Hani estaba negada al compromiso de una relación seria porque le rompieron el corazón y ahora era más cuidadosa. Aunque también cargaba con otras cosas que no le permitían abrirse o entregarse de esa forma a otra persona. Por eso sólo intercambiaba "momentos de placer" como lo llamaba, con quién despertara algún interés en ella.

Resulta que Jungkook y Tae también estaban en el mismo lugar y a pesar de eso, Chanie y yo nos mantuvimos por nuestro lado. Ya nos habíamos besado, ya había permitido que metiera una mano debajo de mi vestido, todo bien –dejó de hablar para hacerse su característico cat eye del lado izquierdo, en un segundo, ya quisiera tener yo esa habilidad. Comprobó en el espejo como había quedado y luego continuó– Entonces, lo dejé por un momento para ir a la barra y ahí estaba Tae con una chica, comenzó a molestarme como es lo usual y tiró "accidentalmente" –hizo comillas con dos de sus dedos– un trago de amaretto en mi vestido –su tono se endureció debido a la molestia y me miró– Era blanco, Max. Quedé con una mancha gigante en todo el área del abdomen, además de pegajosa. Me enojé tanto que me largué de allí.

–No creo que lo haya hecho intencionalmente. –Apoyé el mentón en mi mano derecha.

Tú eres la única que cree que Taehyung no es capaz de matar ni una mosca.

–Hani pero tú tampoco eres muy buena con él, que digamos.

Ya, pero yo no ando por ahí haciéndome la correcta.

–No creas que lo estoy justificando. El otro día me contó que derramaste café sobre sus pantalones cuando te quedaste con él y Jungkook, eso no fue un accidente.

Si lo fue. ¿Ves? Es vengativo –me señaló con su brocha– Toda esa fachada que tiene de hombre caballeroso y altruista me la paso por el... –Apretó los labios, tragándose la grosería que pensaba soltar. Creo que se dio cuenta que era muy temprano para decir tantas malas palabras.

–¿Y qué? ¿Te va a pagar el vestido al menos?

Eso espero.

–Y yo espero que se besen de una vez, si es que no lo han hecho ya.

Que infantil –bufó. Si, claro, y yo era la infantil–. Me tengo que ir. Hablamos luego ¿si?

–Claro.

reformed •myg (problematic book #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora