あ┊ Chapter 38. Final parte uno.

4.7K 518 138
                                    

Y todo cobra sentido cuando tienes la verdad delante de tus ojos, ya no estás más cegado. Has sido iluminado por la luz de lucifer, siéntete afortunado. ❞

Incertidumbre

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Incertidumbre. Es todo lo que puede sentir Jeongguk en el largo camino que ha tenido desde que salió de aquella vieja casa, no sabe donde carajos podrían estar Abraham y Jimin. No tiene idea alguna de su ubicación, ni siquiera sabe quien le envió ese maldito mensaje. Podría ser cualquier persona, tal vez Kim, Min o incluso el mismo Seokjin. Sabía que no estaba equivocado sobre asesinar a ese jodido traidor, debió hacerlo él mismo. Siente que la angustia y la furia está quemándolo vivo por dentro, grita fuertemente cuando nota el sendero desconocido, sólo está dando vueltas por el mismo lugar sin poder avanzar.

Está terriblemente desesperado, la vida de ambos adolescentes corren riesgo como entretenimiento para esos crueles espectadores en la red oscura. Mientras Jimin y Abraham no notan nada, alguien los acecha grabando su próxima muerte como placer. Y entonces Jeongguk recuerda lo que le dijo Abraham y el motivo principal por el cual se cabreó tanto con él.

Había dejado libre a Seokjin.

¿Acaso había una mínima posibilidad de que Seokjin estuviera detrás de todo esto?

-¿No lo hiciste verdad?

Abraham no puede evitar tragar saliva cuando escucha la pregunta con atención, una gota de frío sudor cae de su rostro deslizándose hasta caer en el suelo.

Jeongguk lo sabe, claro que lo hace.

-Yo...Gguk, lo siento. -Es todo lo que puede soltar el rubio mientras siente la devastadora mirada del mercenario puesta sobre él, le perpetua de una manera tan intimidante. -No me atreví, no podía.

Jeongguk aprieta sus puños con tanto enojo que las venas se marcaban perfectamente en sus brazos, una sonrisa de sorna se adueña de sus labios y saca la arma calibre de su bolsillo observándola fijamente.

Iría por ese cabrón, por el que se atrevió a meterse con algo que era de su propiedad. Oh, y no saldría vivo, estaba claro.

-Piensa, Jeongguk, piensa. -Se susurró a si mismo tratando de recordar algún indicio para poder dar con el lugar, siguió caminando por el sendero hasta que logró encontrar la carretera en donde días atrás habían asesinado a Ji Han. -Carajo.

El mercenario tuvo que guardar su arma de vuelta a su bolsillo para evitar sospechas entre la gente que pasaba, divisó un restaurante a unos metros más y sin pensarlo abrió la puerta para entrometerse.

-Buenas tardes, señor. ¿En qué puedo ayudarle? ¿Va a ordenar algo?-Le cuestiona una de las meseras rubias con la libreta en su mano, Jeongguk niega levemente tratando de parecer lo más relajado posible.

-Estoy buscando a mi amigo. -Respondió tajante ganándose una mirada extraña por parte de ella, el azabache le sonríe falsamente y tal parece que es suficiente para que la chica deje de mirarlo así. -¿Usted lo ha visto? Tiene el cabello negro, es alto y tenía un uniforme escolar de la preparatoria Han School Seúl.

Deep Web あ GgukMin/Jimharem Where stories live. Discover now