Compañero Olvidado ( Libro 4 )

Capítulo 10

Saint se sentó ante la mesa con su hermano Singto y su hija Samy, mientras Krist y Win estaban en la cocina organizando la comida. Sabía que Bright y su padre habían ido a 'asar a Zee a la parrilla' por el tema de su apareamiento. Quería estar ahí, defendiendo a su hombre,

pero pensó que era mejor si se lo dejaba todo a Zee.

Comprendía por qué lo había hecho Zee. Sí, le dolía haber perdido tanto tiempo de estar juntos, pero si los papeles se hubieran invertido, sabía que habría hecho cualquier cosa para mantener a salvo a su compañero. Con él teniendo solo dieciséis años de edad cuando ocurrió, no era difícil imaginar la elección que había tenido que tomar Zee.

Krist y Win acababan de poner la mesa para el almuerzo cuando entró Bright seguido por su padre y por Zee. Saint se levantó y corrió hacia su compañero, echó sus brazos alrededor de su cuello y lo abrazó.

—Hey, todo está bien —le tranquilizó Zee.

No tenía ni idea de por qué estaba actuando de forma tan necesitada, pero pensó que sería por tener finalmente a su pareja después de tanto tiempo.

Todos tomaron asiento y comenzaron a comer. Media hora más tarde, se enteraron que los demás llegaban a casa. Todos miraron cómo un brillante Gulf rebotaba en la sala de espera con unas imágenes en su mano. Saint siguió mirando cómo su madre entraba a continuación, seguida por un muy pálido Mew.

Gulf estaba mostrando a su padre las fotos.

—Mira, este es el bebé A, y aquí el bebé B. — explicaba, mostrando el papel en sus manos.

Joe miró sorprendido y el silencio descendió sobre la mesa.

—¿Gemelos?

Gulf amplió la sonrisa y el hombre comenzó a asentir con entusiasmo.

Sin embargo, Mew se veía un poco verde.

—¿Estás bien hermano? —le preguntó Saint.

—Gemelos —susurró su hermano.

—Oh, no te preocupes por él. Estará bien en un minuto. Se desmayó en la clínica, pero solo necesita un poco de tiempo para acostumbrarse —anunció su madre.

La sala estalló en una carcajada al saber que Mew se había desmayado a causa de un par de bebés. Mew se sentó ante la mesa antes de volver a desmayarse. Gulf lo siguió y se dejó caer en su regazo. Los brazos de Mew le dieron la vuelta automáticamente y comenzó a frotar su vientre. Gulf se sentó, tarareando alegremente.

—Así que, de acuerdo con los doctores, estoy de poco más de seis semanas. Se me nota porque tengo dos. Todavía es un poco pronto para decir qué sexo tienen, por lo que será una sorpresa. El doctor Patrick se quedó con Thanya para repasar todo lo que necesita saber, además contó que hace una semana, había estado ayudando con un nacimiento —anunció Gulf a la habitación.