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“Me recordó a tí...” •
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El dolor de cabeza había pasado y me dí cuenta al despertarme, ya era de noche y me encontraba sola en la habitación lo que me hizo sentirme triste. Me acomodé en la cama abrazando una almohada y viendo a través de las puertas corredizas, la luna brillaba y el cielo tenía muchas estrellas adornandolo.
La puerta se abrió lentamente y pude ver a Tom entrando en silencio, cuando me vio dejó de ir sigilosamente y se relajó. —Pensaba que seguías dormida
—Pensaba que estabas aquí
—Fui a buscar la cena –alzó una bolsa y de inmediato me pegó olor a hamburguesas y papas fritas.
Se sentó frente a mi y lo vi tragar saliva nervioso, un pequeño olor a perfume de chica me llegó a la nariz pero lo pasé de largo y comencé a comer ya que el hambre que tenía era fuerte.
—¿Por qué estás tan nervioso, Tom? –pregunté.
—¿Yo? ¿nervioso? –negó y evadió mi mirada. —Te imaginas cosas, T/N
Tal vez sí, tal vez estaba siendo paranoica y tonta... Como siempre.
—No hemos pensado en que ponernos para la fiesta de disfraces –dije intentando cambiar el tema.
—Cierto... ¿Que sugieres? –preguntó y me alcé de hombros.
—¿Que tal Sullivan y Boo? –él fruncio el ceño. —¿No te has visto Monsters, Inc?
—No veo casi películas muggles, bonita –rode los ojos y negué ofendida.
—¡¿Tienes casi 20 años y no has visto Monsters, Inc!?
—Pues lo siento
—¿Que clase de persona no la ha visto?
—La clase de persona llamada “Tom Riddle”... Pareces una bebé llorando por un dulce
—Entonces no nos pondremos ese –dije desanimada. —¡Señor y señora cara de papa!
—¿Ellos son de Toy Story? –preguntó y asentí emocionada. —No será ese
