Lover Blue ft. Tom×Sonic

💫)) bebé ❞

Se encontraban vagando por el centro comercial. ¿Otra vez? Pues sí, todo gracias a un capricho del menor.    

La noche anterior habían tenido una noche de juegos de mesa muy larga, el de cabellos avellana se quedó dormido frente al tablero en repetidas ocasiones, pero eso no hizo que el menor perdiera el ánimo. A primera hora, Sonic despertó a Wachoski pidiéndole ir al centro comercial otra vez, apenas Tom fue consciente del día y año en el que estaban fueron al centro comercial.

Ahora se encontraban frente al aparador de una tienda de juguetes, exactamente en la parte dedicada a las niñas.

— ¿Qué es un bebé? —Preguntó, curioso, viendo uno Tom.

— Pues... Son criaturas lindas y pequeñas. —Respondió, viendo la vitrina.

— ¿Maddie puede tener bebés?

— Sí, —Se sonrojó.— Ella puede.

— ¿Yo puedo tener bebés? —Preguntó ilusionado.

Ésto hizo que Tom se sobresaltara, ¿A que venía eso?

— Ahm, no lo creo. —Respondió, desviando la mirada.

El cobalto soltó un resuello, indignado, para luego patear levemente la pierna del humano.

— ¿¡Dudas de mis habilidades maternas!? —Preguntó, enojado.

— No es eso, —Rió levemente.— Solo que, bueno... Tengo entendido que eres macho y bueno, los machos no pueden crear bebés.

— ¿Y tú qué sabes si yo puedo o no puedo? ¡Pruebame! —Dijo, notablemente alegre.

— ¿Y-y si mejor te compro un carrito de carreras? —Preguntó, con un sonrojo cubriendo toda su cara.

— Pero yo quiero un bebé —Murmuró, comenzando a sollozar, liberando algunas chispas.

El de cabellos avellana se alarmó, no era conveniente que el menor generara una sobrecarga en el centro comercial. Se agachó, tomando las mejillas del cobalto, haciendo que éste se calmara poco a poco.

— Okay, ¿Si te compro una dona te calmas? —Preguntó, secando las lágrimas del menor.

— Y-yo quiero un bebé —Hipeó, calmandose.

— Lo sé, pero aún estás muy pequeño para una responsabilidad así. —Besó su frente con suma dulzura, llevándose así un pequeño golpe estático.— Una bolsa de donas siempre te anima, vamos —Respondió, tomando al menor de la mano, alejándose de la tienda.

Sonic lo siguió, pero no por eso dejó de voltear a ver a la tienda y a la vitrina con los bebés de juguete.