Bajo las leyes de mi esposa - Naoya x Lectora

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-"Naoya!"

-"Ugh, no otra vez" se quejó el muchacho al oír la voz de su padre

-"Me encantaría que me des una explicación"

-"De qué? Padre?" dijo mirandolo aburrido

-"Te he conseguido mujeres sumamente hermosas, talentosas, pacientes! Para que al menos una se vuelva tu esposa! Y me dices que no has logrado conseguir que ni una, ni una! Quiera estar contigo?"

-"Que puedo decir? No les gusta mi encantó" río levemente

-"Eres irritante, eso es lo que eres!" su padre se quejó

-"Ninguna de esas mujeres conocía su lugar, se ofendieron al momento en que se los recordé, patéticas y débiles, eso eran por molestarse con algo como eso"

-"Sólo necesitas una mujer que aguante tu carácter?" su padre mencionó mirandolo

-"Tienes a alguien en mente?"

En ese instante Naobito le extendió un papel a su hijo.

-"Firma aquí" apuntó su padre

-"Qué es esto?" tomó aquel papel para leerlo, dándose cuenta que era un acta de matrimonio y un contrato

-"Haces meses está familia nos dio esto! Diciendo que si no lograbamos conseguir una novia para ti en esta fecha, te casarias con la hija única de la familia! Es una gran chance para nosotros de tener a esa familia de nuestro lado! Tiene grandes riquezas, muchos contactos y conocimientos de hechicería!" su padre decia en entusiasmo tratando de convencer a su hijo

-"Tch" chasqueo su lengua terminando de leer todo "Sólo debo firmar y ya?"

No veo nada en mi contra...

Hay bastante a mi favor...

Es algún tipo de trampa?

Pensó por un momento y le dieron una pluma.

-"Sólo debes firmar! Y oficialmente estarán casados! Mañana mismo conocerias a tu esposa!" Naobito le comentó en una sonrisa "No pierdas está oportunidad hijo! A está mujer la conocen como una fuerte belleza! Muchos han sufrido por no poder casarse con ella!"

Este viejo... Está siendo muy insistente...

Pero aquí dice que tengo permitido tratarla como guste a la muchacha...

De verdad no hay nada en mi contra en esto...

Tendré más reconocimiento.

Podré acceder a mayor información de hechiceros que tiene esta familia.

Tendré más privilegio.

Una sonrisa se formó en sus labios y jugó un momento con la pluma para luego firmar.

-"Mañana a primera hora la quiero aquí" dijo sonriendo y dándole esos papeles a su padre

-"Claro que si!" respondió

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-"Ya está tardando demasiado" Naoya se quejó esperando en la puerta de entrada

-"Ten un poco más de paciencia, aún falta un minuto para que sea la hora exacta de encuentro" Naobito le dijo

-"En realidad eran 33 segundos"

Escucharon una voz femenina, observaron y se encontraron con una silueta con un bello kimono en frente de ellos.

-"Hum... Ustedes son los Zen'in? Cuál de ustedes es mi esposo?" preguntaste mirandolos

-"Jeje por más que me encantaría tan bella dama a mi lado! Naoya, mi hijo, es el suertudo" Naobito dijo en una sonrisa

-"Así que tu eres la supuesta belleza"

-"Y tu eres el supuesto próximo líder" respondiste cortante

-"A quién crees que le hablas así mujer?" dijo con una sonrisa irritada

-"A mi esposo" respondiste acercandote a él en una sonrisa "Si eres mi esposo, estas por debajo de mi"

Ambos hombres se quedaron en blanco por tu respuesta.

-"Te deseo suerte hijo mío" Naobito dijo para luego huir

-"Viejo de pacotilla- tu sabías-!" se iba a quejar

En ese instante tomaste su rostro y lo hiciste mirarte.

-"Estoy aquí. Ojos en mi" te acercaste a él mirándolo fijamente "Y yo ojos en ti, así funciona" empezaste a caminar "Ah~ tienes muchas cosas que aprender~" dijiste estirandote

-"Tu! Eres la que tiene que aprender su lugar!"

-"Jeje~" Volteaste a verlo desafiante "Ven y ponme en mi lugar hombrecito"

Esto era sólo el comienzo, de una unión muy compleja.