Existía una manera de saber que tan compatible eres con las personas. Nayoung creía ser perfectamente compatible con su pareja. Sunghoon estaba convencido de que no era compatible con nadie.
Lindo es el destino que une a las personas menos esperada...
—Park Sunghoon —el profesor lo llamó y Sunghoon lo miró con una ceja alzada—. ¿Alguien que quiera como pareja?
Sunghoon se sorprendió.
—Bueno, profesor si lo pone así-
— ¡Señorita Bae! —El mayor exclamó con un tono de entusiasmo—. ¡Perfecto! Serán una gran pareja.
Sunghoon rodó los ojos una vez el profesor se hubiera dado la vuelta, seguido de eso bufó y con su lengua empujó una de sus mejillas. Estaba claramente molesto. Y Heeseung lo había notado.
— ¿Por qué actúas así? —Heeseung le preguntó mirando de reojo a Nayoung—. Parece una buena chica, no entiendo.
—No me agrada. —Fue lo único que dijo. Heeseung lo miró confundido—. Simplemente no lo hace.
—Eso no es muy emocionalmente inteligente Sunghoon. —Heeseung señaló, Sunghoon solo se limitó a levantar sus hombros. No le importaba—. Por lo menos se bueno con ella.
Por el otro lado del salón, Sunoo miraba divertido a Nayoung. La chica pedía a rodillas que le hubiera tocado con alguien diferente, su novio Jay por ejemplo. Su emoción bajo al escuchar el nombre de su pareja y con quién tendría que hacer el proyecto. Suspiro pesadamente cuando el profesor se dio la vuelta. Ella también estaba molesta por su pareja.
—Te tocó con el príncipe del hielo —Sunoo dijo burlándose de su amiga—, y lo digo literalmente.
—El mundo debe ir en contra de mi. —Dijo poniendo sus brazos y cabeza sobre la mesa—. ¿Por qué a mi? Todo hubiera sido mejor si me tocaba con Jay. ¡O contigo! Pero Park Sunghoon, si claro, primero beso a un sapo.
Sunoo rió por el comentario de su amiga. Pero Nayoung se veía lo suficientemente seria como para no estar bromeando. Aún así el comentario le había parecido algo divertido.
—Ya Na, pero el mundo va a creer que estás teniendo la peor ruptura mental. —Sunoo dijo para que Nayoung bajara un poco su voz ya que las personas empezaban a verla—. ¿Por qué no quieres?
—Sunghoon no me cae bien. En lo absoluto. —Respondió sería viendo a Sunghoon desde lo lejos—. Es muy egocéntrico, hijo de mami y papi.
— ¿Cómo sabes eso? —Sunoo cuestionó.
—Solo lo se, es bastante obvio si me preguntas a mi. —Nayoung dijo antes de levantarse de su puesto. Pues el profesor ya había dado la instrucción de que todos se sentaran al lado de sus parejas, y porque había una chica esperando a que se levantara y pudiera sentarse al lado de Sunoo.
—Suerte, no te congeles. —Sunoo bromeó y Nayoung sonrió antes de caminar hacia el puesto de Sunghoon.
Sus miradas se chocaron, no hubo nada más que fríos ojos chocando entre sí. Los dos tenían la misma blanca expresión, no había ninguna emoción reflejada. El ambiente era tenso entre ellos dos, y más para Heeseung quién veía aquella escena como si dos criminales se estuvieran mirando cara a cara.
—Bueno —Heeseung rompió el silencio—. Creo que yo me voy, nos vemos después.
Y los dejó a ellos dos solos.
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