Capítulo 2

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-Hey Mikey, moriste -lo dije al escuchar pasos cerca, sin embargo no alcé la viste

-¿Por qué no me cubriste? -me llamó la atención, y se volvió a sentar para seguir jugando

-¿Acaso querías que yo muriera?, muy mal Mikey -reí ante eso, pero al parecer a él no le causó gracia.

-Hola Monroe -escuché esa voz tan conocida
Y me giré a verlo. Se encontraba recargado en el marco de la puerta.
Se veía tan lindo

-¿Qué tal Anderson? -le sonreí

-¡JA! moriste -se burló y de inmediato me giré hacia el juego

-Esto apesta -bufé

-Veo que empezaron antes -comentó

-Sí... ella vino antes -explicó, yo solo fui a su cama para acostarme-Aunque para ser sinceros, yo ni me acordaba que jugaríamos, pero en fin. Quisimos distraernos, ¿No es así Jane? -dirigió su mirada hacia mi

-Estás en lo correcto -le di la razón

-Entonces... -se sentó en la cama-, ¿Ya podemos jugar los tres o están muy cansados como para hacerlo? -preguntó en cierto tono

-Espera... -me senté de golpe y lo volteé a ver- Anderson... -me miró extrañado- Acaso tú... ¿Estás celoso? -lo señalé y alcé una ceja

Conocía un poco de él, pero no me quería ver como una loca obsesionada

-¡¿Qué?! no, estás loca -abrió sus ojos como platos y volteó a ver al otro chico

-Ah sí claro... -dijo con cierta gracia para luego rodar sus ojos

-Anderson... -me volteó a ver-, ¿Acaso te... gusto? -me acerqué a él-. Lo cuál es comprensible... -Volví a alejarme, y ambos chicos me miraban confundidos- O sea, mírame, ¿Quién carajos no se enamoraría de mí?, es seguro que le gusto a Mikey -sonreí e inmediatamente Ron volteó hacia Mikey con una mirada fulminante

-Si que tienes demasiada autoestima, aunque reconozco que eres linda y todo vas -aseguró y en ese momento, estaba segura que Ron lo quería matar, fue obvio por su expresión-. Pero estás equivocada, no me gustas -sonrió victorioso, como si eso me iba a herir de alguna forma

-Más te vale -murmuró pero tanto Mikey como yo pudimos escucharlo

-Pero al parecer a Ron si le gustas -rió, porque estaba seguro que así era

-Era de esperarse -volteé a ver al mayor de los hermanos Anderson, y pude ver un pequeño ¿sonrojo?- Oh vaya, Anderson se sonrojó -me reí ante eso, al igual que Mikey

Sabía que el burlarse de las personas estaba muy mal, pero así nos llevábamos y no habría porque enojarse. Pero supongo que en aquél momento no era para chistes.

-Ahg, ya basta, ¿Vamos a jugar? -habló molesto

-Vamos Anderson, solo estamos bromeando -trató de aligerar el ambiente

-Pero sí, juguemos -respondí con calma

Empezamos a jugar, seguimos así por un rato hasta que nos percatamos que ya teníamos que ir a la escuela

-Bueno, podemos seguir jugando mañana -Fui la primera en levantarme

-Sí, pero ahora en tu casa, Ron -decidió Mikey, mientras salíamos de su habitación

-De acuerdo -aceptó

-Bien, los alcanzo luego, tengo que ir por mis cosas -comenté mientras me dirigía a mi casa

-Maldición, mis cosas -regresó por sus cosas

-Nos vemos allá -habló Ron, también yendo hacia su casa, yo solo asentí

MI PRIMER AMOR; ron andersonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora