Chapter 3

44 12 2
                                    


¨¿A dónde vas?...¿Por qué me dejaste atrás?. Ven esta noche.... Todas las noches, estoy perdido, tratando de encontrarte. No puedo olvidarte¨... 




-¡No, no me dejes!!-

Mingi estando tendido en su cama. Despertó con una profunda nostalgia y gritando que no lo dejaran. En cuanto se percató de que tenía lágrimas en sus ojos. Se levantó y camino hacia la ventana que estaba en su enorme cuarto justo en frente de su cama. El cual literalmente estaba adornado de todo tipo de joyas y cosas que cualquier chico podría pedir y no tener.

Mirando desde su balcón la vista del mar en lo alto de su castillo, pensaba. Cuantas veces más iba a tener ese sueño, desde que su padre le había pedido que traslade el dinero para ayudar económicamente a la aldea que no estaba muy lejos de la suya, pero de igual modo debía llevarla en barco, porque no habría otra ruta en ese entonces para llegar allí por tierra.

Suspiro y siguió pensando; tenia miedo ya sabia que existían ladrones en los mares, y su padre habría luchado con muchos de ellos. Sabía que se hacían llamar piratas, él estaba preparado para pelear, aunque era su primera vez. No quería ser un asesino, pero tampoco quería ser asesinado. 

Solo esperaba tener suerte. Aunque a veces sentía pena por aquellos ladrones, sabía que ellos no tenían piedad y si tenían que matar lo harían.  

Mingi no entendía qué significaba ese sueño, era tan lindo. Sentía que su vida era un infierno, y cada vez que dormía era el paraíso para él. Tenía esperanza en que algún día iba a encontrar a ese chico, sabía que era una señal para el, uno no sueña el mismo sueño todos los días, porque si. 

Su sueño siempre se trataba de que un chico le decía cosas hermosas, no podía entender todo lo que le decía. Solo sabía que era un chico, porque tenía el cabello corto y lograba escuchar su voz entrecortada, diciéndole esas...cosas . Su sueño solía terminar en que el muchacho se alejaba de él desenlazando sus manos que anteriormente podía sentir tocar  y era entonces cuando todo se tornaba oscuro, ya no se veían las estrellas de la noche, solo se veía. Oscuridad, era cuando sentía como su pecho se apretaba y comenzaba a decir que no lo dejará, él no quería separarse de ese misterioso chico, por eso acostumbraba a llorar cuando despertaba. Mingi nunca se había enamorado, pero conocía lo que se puede llegar a sentir. ¿acaso era posible enamorarse de alguien que solo ves en tus sueños?, era algo que él descubriría pronto


Jamás podría contarle eso a su padre, lo mataría y a su madre... Menos, ambos lo obligaban a casarse con la princesa Yiren, hija del rey Wang III. Él no la amaba, tal vez solo sentía aprecio por ella... Pero el no quería arruinar su vida casándose con alguien que no amaba en realidad. 

Todo era culpa de sus padres,  además de que nunca lo dejaban salir, jamás se valió por sí solo, le decían que hacer y qué no hacer, ellos nunca se percataron de eso. Entre otras cosas, pero sabía que lo querían...

-Solo espero que ella no venga hoy- Dijo Mingi, yendo al baño para lavarse la cara y demás, luego se dirigió al armario para colocarse sus pantalones, los cuales eran largos, porque los cortos los odiaba. Su padre solía regañarlo por eso, ya que un príncipe debía usar cortos, para el eran ridículos. 

Se puso una chaqueta, un saco largo de color marrón sus zapatos y un anillo de oro puro de masomenos 18 quilates que le había regalado su madre cuando apenas tenía unos 7 años, pero él no lo usaba sino hasta ahora.

DREALITY : Sueño o RealidadWhere stories live. Discover now