Octubre 25

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Octubre 03, 2016
Stanford, Cal.

"Querida Ma':

Lamento no haber respondido tus llamadas y correos esta semana, seguramente de no haber sido por la señora que hace la limpieza papá y tu habrían venido a ver que me sucedía.

Se que he pasado días sin hablarles pero he tenido una semana llena de evaluaciones que en definitiva solo me dejan 4 horas para dormir y comer un poco, no te preocupes, cada que tengo un momento libre como y bebo agua. Una amiga se asegura de eso, quizá voy a aumentar de peso.

He hablado con Omi ayer, me ha contado que el Pa' se ha sentido mal, se que es muy apresurado pero me gustaría visitarlo en cuanto tenga tiempo.

¡Conseguí trabajo!
En una pequeña cafetería a las afueras del campus, descuida no dejaré de lado mis obligaciones escolares.

¡Entre a un club de lectura y también a el club de investigación de mi carrera!
Bueno, de hecho, ha sido una de mis profesoras quien me ha propuesto y logre entrar, así que ahora estoy en él... Quizá obtenga una beca en investigación y pueda regresar a casa.

Todo marcha bien por aquí.

Abraza a papá tanto como puedas, prometo llamar pronto.

Besos, Mel".

Envío rápidamente el mensaje, cerro aquella pestaña y abrió rápidamente la nueva hoja en blanco.

Octubre 03, 2016
Stanford, Cal
Bliblioteca central

“Querida Charlotte Sallow:

Hemos tenido una semana maravillosa, maravillosa en todo el sentido de la palabra.

¡Conseguimos y trabajó! ¡Nuestro primer trabajo! Prepararemos café pero supongo que para ser el primero no estará mal, además muchos de los estudiantes tienen un trabajo.

¡Finalmente nos unimos a el club de lectura! Amelia insistió mucho y finalmente lo hicimos y al mismo tiempo ella nos ha inscrito en el taller de investigación nuclear ¡investigación nuclear!

Finalmente comienzo a pensar que realmente vamos a ser ingenieras nucleares ¡tal como el abuelo!. Tan grandes como él.
Y definitivamente si lo logramos sera con ayuda de ella, es como un ángel.

Te confíeso que estas últimas semanas han sido un tornado de emociones y no necesariamente por la escuela. Aquella mujer de ojos tan azules como el océano y yo nos hemos acercado abruptamente después de haber coincidido en la biblioteca. Tomamos café y pastel juntas, comentamos y leemos libros juntas y ahora por obra del destino la universidad la asignó para que comenzará a guiar mi investigación. El remolino de emociones que siento cada que estoy con ella es abrumador, completamente abrumador y te mentiría si te dijera que me da miedo, aquella nueva sensación me da miedo.

Pero a este paso seguramente va a dirigir mi tesis... Quizá podríamos ganar un Nobel si descubrimos algo definitivamente innovador e interesante.

Ella tiene confianza en nosotras.

El abuelo se ha sentido mal últimamente, Omi no esta preocupada así que quizá nosotros tampoco deberíamos de hacerlo, aunque definitivamente viajaremos para verlo muy pronto.

Pd: tenemos una cita mañana! Bueno... No se si debería de llamarla una cita, iré a correr para mejorar mis pulmones, Amelia considera que es crucial, no pude confesarle que yo definitivamente no tengo una buena condición física para el ejercicio.

Deseame buena suerte.
Con amor, Ina”.

Las Cartas Que Nunca Leerás Where stories live. Discover now