Tener una doble vida a Jeon Jungkook le pareció bastante divertido. Pero las mentiras y los engaños pueden costar caro. Y él, lo sabrá mejor que nadie.
❝ Estaría mintiendo si te dijera que no te deseo, Jungkook. Porque lo hago, a nadie he deseado a...
Unos ojitos se podían observar en aquella ventana circular. Hoseok pasó varias veces por la puerta de la cocina, soltando una risita al ver aquella extraña escena.
— Seokjin ¿Qué demonios se supone que haces ahí parado? ¿Estás fisgoneando?
Él negó lentamente, con los ojos entrecerrados, en completa consentración.
— Estoy estudiando a mi víctima. Pensando que sería bueno hacerle.
Hoseok no entendió nada, solo se acercó a Jimin, para que colocara más bebidas en la charola.
— ¿Tú entiendes qué hace Jin?
— Si, él quería saber quién era el tipejo que hizo sentir mal a su hermanito. Ya le dije quién, y está con la loca idea de hacer una travesura. — se encogió de hombros.
Hoseok solo sonrió en grande, tomó la charola, dispuesto a salir hacia la reunión.
— Jin, hazte a un lado. Se me va caer todo y marcharé tú uniforme...
Jin se quedó observando a Hoseok, y después a la charola repleta de bebidas. Dándole eso una idea.
— Voy a necesitar de tu ayuda Hobi...
Sonrió con maldad, y por primera vez, Hoseok sintió miedo.
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— ¿Puedes dejar de mover tu pierna? Casi taladras el suelo. — espetó con cansancio — Me pones de los nervios.
Jungkook ni se inmutó, siguió moviendo la pierna fastidiado de la situación en la que se encontraba; pues Taehyung seguía a un costado de Choi, con aquella delicada mano reposada en el brazo del hombre, sonriendo a cada instante, dejándose besar la mejilla y abrazar por él.
— ¿Ya te diste cuenta como Choi voltea hacia nuestra mesa? Que hijo de puta.
Tomó una copa de el mejor vino, y la bebió por completo, tomando después una segunda.
Yugyeom viró los ojos. — Si ya me di cuenta, como también me di cuenta de que a Taehyung no le molesta en lo absoluto estar con él. Solo tranquilízate, deja que esté con Choi y ya. Al fin y al cabo, solo es tu amigo.
— Si, que se jodan los dos. Ven, vamos al jardín a fumar un cigarrillo.
Yugyeom aceptó. Se pusieron de pie y ambos jóvenes comenzaron a caminar, cuando un mesero se interpuso en el camino de Jungkook, haciendo que la charola de las bebidas cayera encima de su traje de gala.
— Ops, lo siento, no lo vi.
Jungkook se quedó en shock.
Observó su camisa y saco, húmedos con líquidos de diferentes colores.
Yugyeom apretó los labios, pero no pudo evitar soltar unas carcajadas, las cuales fueron acompañadas por los presentes en el gran salón.
El azabache apretó la mandíbula, ¿Su noche no podía ir peor?
