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ㅡ UNO, UNO.

ㅡ MENTIRA SI TE METISTE CARTAS EN EL CULO, LEVANTATE, YO LAS VI. QUE TRAMPOSO, TAEYOUNG.

dándole poca importancia a las luces que titilaban, seongmin y taeyoung hacían un barullo de aquellos. se habían pasado dos horas enteras tomando bebidas calientes y jugando al uno, taeyoung movió el trasero y puso cinco cartas sobre la mesa.

ㅡ y tienes la audacia... ㅡ seongmin entrecerro los ojos y dejó las cartas sobre la mesa. ㅡ es hora de dormir.

ㅡpero si apenas van a ser las once.

ㅡ yo debo levantarme temprano. ㅡ habló el menor, caminó pasando el estante de libros y abrio uno de sus cajones, para tirar un pantalon y un hoodie sobre su cama.

ㅡ ¿y a mi no me das ropita para dormir? ㅡ taeyoung apareció detras suyo y se tiró con toda confianza sobre su cama.

el menor rodo los ojos y sacó exactamente lo mismo para taeyoung.

ㅡ pero despues me la lavas, olor a marmota. ㅡ lo miro desafiante. ㅡ y sal de mi cama. puedes dormir en el sillon, o debajo de mi colchon hay uno de repuesto, sácalo y ponlo en el piso, si quieres, yo me ire a cambiar.

ㅡ dios, en el piso me va a hacer dormir. ㅡ taeyoung miró hacia el techo y se dispuso a hacer lo que el menor le había dicho, cuando él volvió de cambiarse, pidió permiso y fue al baño a hacer exactamente lo mismo.

una vez que seongmin le dio la ropa de cama necesaria a taeyoung, ambos se acostaron en la oscuridad y con el bajo sonido de la television del otro lado de la biblioteca de seongmin, con el mayor abrazando al señor pelusa, se desearon buenas noches e intentaron conciliar en sueño a pesar de la tormenta afuera ㅡy el hecho de que estaban en presencia uno del otroㅡ

ㅡ lo que faltaba, mi gato.

seongmin dio vuelta sobre su espalda una vez más en aproximadamente, cinco minutos. podía escuchar la respiración calmada de taeyoung, lo que le avisaba que el mayor ya se había dormido. se acercó hacia el lado derecho de su cama y asomo su cabecita por el borde. supo una vez más que era real, que taeyoung estaba durmiendo en su casa.

suspiró y cerró los ojos fuertemente, su corazón se sentia abrumado con tal vista. tapado hasta el estomago, acostado sobre su espalda...su rostro se mostraba en paz, tenía la boca abierta (lo que lo hizo reir) y el cabello corto negro estaba intacto. con su brazo izquierdo abrazaba al señor pelusa quién se encontraba durmiendo placidamente a compañía del mayor.

el escenario fuera del apartamento lo hacía ver irreal, el sonido de la tormenta era como el soundtrack para ver dormir a taeyoung...aunque eso sonaba aterrador en su cabeza, realmente se estaba volviendo loco al verlo, porque se conectaba con todo aquello que estaba sintiendo últimamente.

y asi, no dormiría en toda la noche. lentamente, se levantó dispuesto a hacer lo que hacía casi todas las noches, poder acudir a un medicamento para mínimo, dormir sin levantarse una que otra vez cada noche.

taeyoung se removió en el colchon y se tapó hasta el cuello, buscando el tacto del pequeño pelusa, al no encontrarlo, abrio los ojos.

por las pequeñas partes que los libros no tapaban la biblioteca, a su lado derecho, taeyoung vio la luz de la cocina prendida. parpadeando un par de veces, palmeo el colchon y cuando tomo su telefono miró la hora. 11.45.

¿sólo había dormido cuarenta minutos?

se enderezó y miró hacía la cama de seongmin, y cómo lo esperaba, el no estaba allí. su instinto fue destaparse y pararse, tambalearse y caminar lentamente hasta la cocina.

muchacho ojos de papel ㅡ ﹟kim taeyoung, ahn seongmin. ✧  ₄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora