Capítulo 8: MAS QUE UN SUEÑO

75 28 52
                                    

Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial;

Mateo 6: 14

●°●°●—————— 🌊 ——————●°●°●

Caminaba por el bosque.

El sol brillaba con intensidad.

Yo llevaba puesto un vestido blanco y estaba descalza.

Camine y al final del bosque me encontré con un prado lleno de flores de diferentes colores.

Era un lugar hermoso.

La brisa fresca soplo hacia mi rostro.

Cerré los ojos por unos instantes, disfrutando de la naturaleza de aquel precioso jardín.

De pronto escuche una voz que se oía a lo lejos y decia:

Todo va a estar bien, no temas, todo va a estar bien. No importa que tan mal se vean las cosas todo va a estar bien.

Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. JOSUE 1:9

Abri los ojos y estaba acostada en mi cama.

Todo había sido un sueño.

Tome mi biblia y leí aquel pasaje que apareció en mi sueño.

Lo leí en voz alta.

Y pude sentir que era Dios el que estaba hablando a mi vida.

Y me decía que fuera Valiente, y que me esforzará porque Él estaba conmigo.

Así como Dios estuvo con Josue, el estaría conmigo.

Me sentí muy feliz al recordar ese sueño.

No era un simple sueño.

Era Dios dándome palabras de aliento.

Por la tarde de aquel día me reuní con mis amigos en la playa, queríamos salir un poco para distraernos y descansar despues de una larga semana de clases.

Como Mamá casi no estaba me lleve a Saray conmigo, ella estaba feliz de conocer a mis nuevos amigos, le había hablado mucho de ellos.

Cuando llegamos al lugar acordado ya todos estaban ahí: Yareisi, Rosalie, Julieta, Edward y Josh.

— Hola Chicos — saludé con una enorme sonrisa en mi rostro

— Hola — respondieron todos al unísono

— espero que no haya problema, pero traje a mi hermana conmigo — la señalé y ella sonrió tímida.

— oh no, claro que no, es un gusto conocerla — se apresuró a decir Yare

— ¿cómo te llamas pequeña? — Le preguntó Edward

EN MEDIO DE LA TORMENTA Where stories live. Discover now