EN MEDIO DE LA TORMENTA

Capítulo 25: NO ES COINCIDENCIA

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~ En Dios hay propósitos, no casualidades ~

— ¡no puede ser posible! — exclamó Miranda con lágrimas en los ojos.

— ¡Miranda es un gusto volver a verte! — Le dijo José.

Mara se paró rápidamente de su lugar y corrió a abrazarlo.

La última vez que se vieron fue en el campamento, de ahí solo estuvieron en contacto por mensajes.

Y hoy estaban parados frente a frente, mirándose cara a cara.

— ¡te dije que nos volveríamos a encontrar! — le dijo él mientras depositaba un beso en su frente.

— que casualidad que te encontrara aquí

— En Dios hay propósitos, no casualidades....

Los dos se abrazaron fuertemente durante varios segundos.

Imagino la alegría que estaban sintiendo al volverse a ver.

Todos estábamos viendo aquella escena romántica.

Era como una película de amor lo que estaba ocurriendo frente a nuestros ojos.

José se paró frente a Miranda, tomó su rostro entre sus manos, la miró fijamente a los ojos y luego dijo:

— Miranda, Desde el momento que te vi supe que serías alguien importante en mi vida...Y desde ese instante no puedo dejar de pensar en ti. ¡Te amo Miranda!

Mara lo miraba con ternura, sus ojos estaban cristalizados.

— José yo también te amo, pero no crees que....— él la interrumpió.

— se que no nos conocemos perfectamente bien, pero estoy seguro de que Dios nos dará una larga vida por delante para conocernos...¿te gustaría ser mi novia?

— siiiii, claro que sii — Miranda saltó de la emoción y lo abrazo fuertemente.

Todas las personas que estaban presentes en aquel lugar aplaudieron y felicitaron a los recientes novios.

— ¡Felicidades! — exclamó Edward.

— ¡Qué Dios bendiga su relación! — dijo Yareisi.

José se quedó a almorzar con nosotros.

Y la sorpresa que nos llevamos fue que él había venido desde su lugar de origen a quedarse en este lugar y asistir a esta escuela.

Todo lo hizo por Miranda, por estar a su lado...

Por caminar juntos tomados de la mano de Dios...

Quizás muchos dirán "que casualidad que se hayan vuelto a ver"...

Pero no...

No es casualidad....

Todo es parte del plan de Dios para sus vidas...