El acuerdo. Parte 5.

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Bueno, les dejo el penúltimo y tengo que decir que menos mal que me dio por releerlo porque había un párrafo cortado y no se entendía nada... lo corregí de inmediato y aquí lo tienen, pa disfrutarlo ♥ Espero que les guste este también, que me comenten que me encanta leerlos, que si les gustaría leer alguna situación en concreto entre ellas en los one shots que vendrán después me lo digan... y que voten, que da mucho ánimo.

Un saludo y nos leemos pronto :)

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Ni diez minutos había tardado en llegar desde su lugar de trabajo hasta su cafetería de confianza. Por la rapidez en llegar y que la rubia no solía hacer planes entre semana a esas horas, Julia supo que la quedada era urgente y no le hizo falta ni preguntarle para saber el por qué. Todavía no les habían traído la cena y Alba ya le había contado con pelos y señales todo lo ocurrido la noche anterior.

Julia tomaba mentalmente nota de todo, pues su amiga parloteaba nerviosa y casi sin detenerse más que para beber un poco de agua en contadas ocasiones en las que alzaba la mano para que la otra no la interrumpiera mientras lo hacía.

- Y el caso es que no tengo ni puta idea, Juls. -pareció llegar al final de su explicación. - No sé por qué mi yo borracho hizo y dijo todo aquello, no sé qué quiero que pase a partir de ahora... ¡No sé nada! -se exasperó, llevándose las manos a la cara.

La gaditana puso los ojos en blanco y dio un sorbo a su cerveza con toda tranquilidad. Aprovechó el momento en el que el camarero les trajo la comida para ordenar su mente y sobre todo para pensar una forma de responderle que no la hiciera cerrarse en banda.

- ¿Me vas a decir algo? -pidió en cuanto el chico recogió las dos botellas vacías y se encaminó de nuevo hacia el interior del local.

- Alba... -suspiró, todavía no muy segura de por dónde debía empezar.

- Joder tía, habla ya que me estás estresando. -rio.

- ¿Te acuerdas del chico aquel con el que estuviste saliendo el primer año de universidad y que nunca nos quisiste presentar? -abrió el melón, esperando no estarse equivocando.

La cara de confusión de la rubia no se hizo esperar y por un momento dudó haber introducido bien el tema.

- Toni, sí. No éramos nada serio y no vi la necesidad. -se encogió de hombros, todavía sin tener claro hacia dónde quería ir Julia. - ¿Pero a qué viene esto ahora? -preguntó contrariada. 

- No teníais nada serio pero llevabais saliendo unos 3 meses y de un día para otro le diste puerta... -insistió.

De perdidos al río. Pensó Julia.

- Bueno, supongo que hasta los 3 meses no me di cuenta del todo de que no quería estar con él en ese momento... -le restó importancia.

- ¿A los 3 meses o la noche que Natalia nos contó que le gustaban las chicas? -boom, ya se había abierto el melón.

- ¿Qué insinúas? -le preguntó, empezando a sentirse cada vez más acorralada.

- Pues que esa misma noche te piraste del club antes de que nos fuéramos todos y al día siguiente te preguntamos por él y le habías dejado. Así sin más.

Alba hizo amago de hablar, pero realmente no sabía qué decir y prefirió mantenerse callada, comiendo despacio y con la mirada clavada en su plato.

- ¿Por qué le dejaste? -indagó.

- Ya te lo dije, me di cuenta de que no quería seguir con él y ya. -las palabras salieron con convicción y algo de enfado de su boca, pero no se había atrevido ni a mirarla y Julia estuvo segura de que había dado en el clavo.

One shots AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora