Padres Temporales | Soukoku

Uno

Akutagawa y Atsushi se encontraban, como de costumbre, peleando en medio de un puente, ignorando a un criminal que, se suponía, debían capturar (o matar en caso de Akutagawa).

Ambos chicos, en cuanto se vieron, dieron comienzo a una discusión, interrumpiendo el bien planificado discurso del criminal.

Este, claramente ofendido, tomo dos frascos de ese extraño bolso que cargaba, los coloco en una especie de pistola y disparo contra el peli negro y el albino.

Lo ultimo que se escucho fue el sonido de un peso cayendo al mar y el llanto de dos bebés.

Kunikida cargaba a Atsushi, meciendolo para que dejara de llorar.

Unos empleados que trabajaban en una fabrica cerca del puente oyeron el llanto de un bebé cuando salieron a almorzar. Pronto se dieron cuenta que no se trataba de se sólo uno, sino dos. Los llevaron a una estación de policía cercana.

Por fortuna, ahí se encontraba Kunikida pagando la multa de un detenido Dazai. Ahí, el rubio reconoció a ambos bebés, y después de un interrogatorio por parte de la policía, dejaron que se los llevaran.

Dazai se negaba a cargar a los bebés, atribuyendolo a que le daban asco.

Al llegar a la Agencia, Yosano se encargo de revisar a ambos bebés. Atsushi no dejo de llorar en todo el proceso, extendiendo sus brazos hacia Kunikida en busca de protección.

Akutagawa en cambió sólo le dedicaba malas miradas a la doctora, pero al final acabo profundamente dormido.

Yosano concluyó que los bebés debían tener unos ocho meses.

Los detectives pensaban en las posibles causas que pudieron llevar a que esto ocurriera.

Ranpo en cambió decidió acompañar al bebé falto de cejas en su siesta.

Dazai resolvió muchas de las incógnitas, menos el cómo solucionarlo y hacía donde huyó el criminal.

"Buenoo, ¿qué haremos?" pregunta Dazai, después de un silencio incómodo.