✐Capítulo 15.✎

1.2K 121 18
                                    

—Estás cambiando demasiado, ¿no crees?

—¡¿Y a ti en qué te afecta de todas maneras?! —habló exaltado.

—Tae... jamás me habías hablado así —musitó con la cabeza gacha.

—Lo siento ¿sí? —suavizó su tono de voz —No estoy pasando por un buen momento Jungkook, lo último que quiero es escuchar críticas de parte de mi hermano.

—No son críticas, lo sabes. Sólo estoy sorprendido, dios, primero las perforaciones y luego tu cambio de color de cabello, te pareces tanto a... mí.

Luego de escuchar que se vería con Yoongi, le sonrió a su hermano y salió prácticamente corriendo a su habitación, y es que le era inevitable no asociar su cambio de look a sí mismo, y aunque eran mellizos, tenían rasgos diferentes, pero con el impresionante cambio, ahora eran demasiado similares. No podía evitar seguir pensando en que Taehyung sabía algo más, pues ciertamente Jimin no ocultaba su gusto por Jungkook y los rumores eran rápidos en correr por toda la escuela.

Respiró hondo tratando de calmarse y llamó a su novio para contarle lo sucedido, pidiéndole luego que necesitaba verlo. Si bien, para el resto no parecía no ser cosa de mucha importancia, para el azabache era preocupante, encima que el comportamiento del ahora pelinegro también estaba cambiando evidentemente.

No requería ser demasiado inteligente para darse cuenta que había una historia detrás de todos esos repentinos cambios.

—Hey, siendo sinceros... no sé que pensar al respecto. Lo vi salir de casa y vaya que está muy cambiado, realmente se parece mucho a ti, pero no encuentro respuesta.

—¿S-se parece a mi?

—Yo... no quise decir eso ¿sí? Me refiero a que...

—¿Cuántas personas saben de lo nuestro, Jimin?

—Sólo Yoongi hyung, además, el podrá estar demasiado perdido por tu hermano, pero no es la clase de persona que haría tal cosa como delatarnos.

—Tengo miedo Jiminie.

—No tienes por que temer kookie, estoy aquí contigo y siempre voy a estarlo pase lo que pase... ven aquí —cerró la distancia para envolverlo con sus brazos y depositar un corto beso en su sien.

Ver a Jungkook sufriendo de tal manera le afectaba también, pues le tenía demasiado cariño como para no darse cuenta que vivía con el miedo de despertar y haber perdido el amor y la confianza de su hermano.

Cuando el azabache se giró a mirarlo, sintió su corazón quebrarse, ver aquellos ojos que a diario brillaban por felicidad, ahora lo hacían por las lágrimas que intentaba retener.

Quería acabar con el dolor de ambos hermanos, pero estaba seguro que lo único que provocaría sería todo menos aquello, aunque tampoco podía ocultar su relación con Jungkook por demasiado tiempo, no era correcto y podía traer demasiados problemas y eso, era lo último que quería.

—¿Sabes, Jimin? Siempre quise saber que se sentía estar enamorado, creí que todo sería bonito y sin problemas, pero todo se mira tan diferente.

—Eso es porque las relaciones no se construyen de un día para otro mi amor, siempre habrá altibajos y cuando dos personas están súper destinadas a estar juntas, tienen muchas dificultades, pero como lo dije... Están destinadas y sea en el momento que sea, van a encontrarse para no dejarse ir jamás.

—Entonces... ¡Oh por Dios! Somos almas gemelas Jiminie...

—Lo somos, así que no te preocupes demasiado, vamos a estar juntos hasta la eternidad.

¡Maldito Flechador! (Jikook)[Adap.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora