CAPÍTULO 11: Trauma.

27.4K 1.9K 321
                                    

Narra Mike:

Miro una vez más el rostro sereno de Ali mientras duerme en el asiento de copiloto de mi auto. No puedo creer que ya sepa mi secreto mejor guardado en toda la vida. Creí que cuando se enterara se enojaría demasiado al grado de alejarse de mí y que yo estaría eternamente avergonzado por mi absurda confesión, pero es todo lo contrario, ella aun me considera su amigo y yo estoy más tranquilo después de decirlo.

Miro hacia delante y sigo conduciendo, una calle tras otra, delante y detrás de muchos carros, dejando que el aire y la brisa del mar acaricie nuestros rostros. Queriendo detener el tiempo para poder seguir viéndola así, tan dulce y tan tranquila junto a mí. Me detengo frente a su casa pero no tengo el valor para despertarla o simplemente no me dan ganas de hacerlo.

No sé en qué momento me comenzó a gustar y tampoco sé cuando comencé a enamorarme tan tontamente de ella. Pudo haber sido la primera vez que me defendió o cuando dijo que cuidaría de mí. Tal vez fue cuando rompió su caparazón y me mostró la verdadera Allison herida y dolida, sabiendo que tenía demasiadas cicatrices pero que aun así se ofrecía para cuidarme.

No sé en qué momento se detonaron dentro de mí todos estos sentimientos hacia ella, sentimientos que guardé en silencio solo para mí. Odiando todas las malditas noches que se emborrachaba hasta tomar su teléfono y llamarlo, llamarlo llorando con el alma desgarrada porque aún seguía amándolo y lo extrañaba más que a nada en este mundo. Llegue a odiar a ese hombre invisible que jamás respondía las mil llamadas de cada noche que ella le hacía. Ese hombre que dejó heridas abiertas en su corazón, heridas que no la dejaban ir al mundo y ser feliz.

Lo odiaba tanto que dije que si lo llegase a ver algún día le rompería la cara. Algo que obviamente no pude hacer por respeto a ella. Porque ella lo ha perdonado y ha decidido estar con él una vez más porque ha decidido amarlo de nuevo y porque ha roto mi corazón sin saberlo.

Y no la culpo, no culpo a Allison y mucho menos a él, me culpo a mí por no haberme confesado antes o por simplemente haberme enamorado de esta forma unilateral. Me culpo a mí por haber creído que quizá, algún día podría hacer que ella se fijara en mí y me diera una oportunidad. Pero no, eso sucedía solo en mis sueños, en los mejores de ellos.

Miro una vez más a Allison y extiendo mi mano para despertarla. Antes de que pueda hacerlo ella comienza a respirar de manera agitada y a moverse mientras frunce su ceño y en general arruga toda la cara.

-       Ali. – la llamo pero no hay respuesta. - ¡Allison! – levanto la voz y muevo su hombro. - ¡ALLISON! – grito con todas mis fuerzas sin dejar de moverla y ella se despierta sobresaltada.

-       Tengo miedo. – dice lanzándose a mis brazos y comenzando a llorar.

-       Todo está bien, estoy contigo, ¿ok? – digo y ella me abraza más fuerte.

-       ¿Y si ella es como Camila? – pregunta con su débil voz.

-       ¿Quién es Camila? – cuestiono tomándola con fuerza entre mis brazos.

-       Quien intentó matarme. – responde y de inmediato se aleja de mí.

-       Quien hizo ¿qué? – Allison me mira con el rostro rojo, lleno de lágrimas y con los ojos llorosos. - ¿De quién hablas? – vuelvo a preguntar pero ella evade mi mirada y sale del auto.

-       Gracias por traerme. – dice cerrando la puerta.

-       Allison. – salgo del auto y camino detrás de ella. Al entrar a la casa Allison rompe en llanto una vez más y se tira al suelo. - ¿Qué pasa? – intento tomarla entre mis brazos pero ella se aleja como si me tuviese miedo.

MATRIMONIO POR CONTRATO 2: Caminos entrelazados.Où les histoires vivent. Découvrez maintenant