Mi Constelación Favorita (Los Inicios)

COMPLICACIONES

-Si ella puede ayudar ¿Entonces para que te necesitaba a ti madre?

-Necesita que alguien canalice la magia – suspira – ve a cuidar a Laureen, está en la casa de Chiara y se quedó muy preocupada

-Mi esposa le pidió que se quedara

-Necesito que me obedezcas Nick – levantó una ceja en dirección de su hijo – por favor

Con un asentimiento se disculpó con Gerd y salió del lago trotando hacia donde le había indicado su madre.

-Ninguno de mis hijos conoce a mi hermana y así debe permanecer – suspira viendo la tranquilidad en las facciones de Chiara – lamentablemente mi magia no va a ser suficiente para neutralizar la suya así que ella tendrá que ayudarnos y la partera tendrá que hacer su trabajo con el niño

-No lo entiendo del todo – le dice confundido –

-Es un bebé con magia poderosa, que viene de una madre poderosa que no controla bien sus poderes... no es algo sencillo Gerd, cuando una bruja tiene un hijo el aquelarre es el encargado de neutralizar la magia para que se dé un parto normal, como el de cualquier otra mujer, pero ellas no sabemos de dónde vienen, hacen cosas que nosotras no podemos, pero la magia es magia y en eso sí podemos ayudar

-¿En qué ayudo? – llegó Marena – ya mandé el mensaje

-Necesito que pongas una barrera justo en la entrada del río, para que entonces nosotras podamos contener la magia que se pueda llegar a salir de control, y tú serás la última barrera de refuerzo

-Debes hacerlo lo más poderoso que puedas Marena – le dice Dahlia – tú hermana se va a descontrolar apenas empiece la verdadera labor de parto

El grito de Chiara atrajo la atención de todos.

-Está avanzando muy rápido – anunció la partera –

Marena se quedó en la orilla del lago y se sentó con las piernas cruzadas, enterró sus manos en la arena sintiendo su energía y comenzando a hacer la barrera, la cual los comenzaba a encerrar y se extendía poco a poco.

-Te dije que tenía que estudiar conmigo – le reclamó Dahlia a su hermana –

-Marena tiene perfecto control sobre su magia

-Sí, pero es densa, lenta

-Pero poderosa – le corta la conversación al poner los hombros de Chiara en los brazos de su marido – es mejor que nos pongamos a neutralizarla, Marena hará un buen trabajo

-Eso espero – levanta las manos comenzando a murmurara las palabras para el hechizo –

Esther imitó a su hermana repitiendo el conjuro, logrando que las facciones de Chiara se relajaran nuevamente, podían sentir como les empujaba, rechazando lo que decían.

-No está funcionando del todo bien – les gritó Marena – puedo sentirla

Dahlia asintió abriendo los ojos concentrándose en la joven que se encontraba recargada entre las piernas de su marido, sus uñas se encajaban en la palma de su mano y sus ojos se encontraban cerrados, con la respiración acelerada y el rostro completamente rojo por el esfuerzo.

-No habrá otra manera – murmura Dahlia – no pares con lo que haces Esther, eres la segunda barrera