Rollisi: Todo cambia con un beso.

Pista.

Estaban todos en la oficina de Olivia revisando uno a uno los videos de la no-boda de Fin.

La pantalla estaba del lado de la ventana que da a la sala de interrogaciones que tiene una mesa, libros y juguetes. La de la izquierda.

Todos habían acercado sillas para poder observar mejor. De un lado estaba Fin y Pheobe, luego estaba Kat y desde el escritorio pero viendo hacia la pantalla estaba la Capitana.

Rollins y Carisi estaban recargados en la pared que da a la otra sala de interrogaciones, con la respiración cortada, temerosos de lo que sus compañeros verían. No porque fueran dos chicos de secundaria que habían hecho algo indebido. Les molestaba la cantidad de preguntas y comentarios incómodos que se vendrían a partir de eso. Ni ellos mismos procesaban aún lo que había pasado. Aún no procesaban el hecho de que habían besado al otro.

Seguro el escuadrón diría "¡lo sabíamos!" o "¡No puedo creer que al fin lo hicieron, ya era hora!" porque obviamente el escuadrón sabía que algo pasaba entre Rollins y Carisi, pero simplemente no estaban listos para todo aquello. Y no querían que esa sensación de compartir ese secreto tan íntimo se fuera.

Rollins tragó saliva duramente.

Carisi la miró y con un ligero roce en el hombro le hizo saber que él estaba ahí y no la dejaría pasar sola por todo aquello.

Rollins sólo asintió.

La capitana se quitó las gafas para poder tallarse los ojos.

En ese momento, Kat habló:

—Sé que debemos revisar todos los videos, pero de verdad no tiene sentido estar horas mirando esto si todos aquí sabemos que Sandra estuvo a la vista de todos esa noche. Tuvo que haber sido atacada al inicio del evento o al final cuando nos hemos ido. Aunque dudo que alguien que fue atacada en el inicio de un evento, pueda estar así de calmada —dice Kat al levantarse y señalar el televisor.

Antes de que la capitana pueda hablar, Carisi dice:

—Estoy de acuerdo con Kat.

Todos voltean a verlo sorprendidos, incluso Amanda alza una ceja.

—Agh, vamos. Sé que no concordamos en muchas cosas, pero Kat tiene razón, simplemete no tiene sentido. Algo debió pasarle cuando todos nosotros ya nos habíamos ido.

La capitana se dirige a otra carpeta de videos.

—Si su teoría es cierta, deberíamos encontrar algo aquí.

Y reproduce un video.

Carisi voltea a ver a Rollins asintiéndole, tratando de decirle que todo estaría bien. Ella soltó el aire que estaba conteniendo.

Carisi se colocó de nuevo a su lado.

En ese momento en el video se mostraba a Sandra tratando de subir a su auto, cuando una mujer rubia con capucha le jala del pelo y la golpea hasta dejarla inconsciente. La arrastra hacia un carro y la mete al maletero y sale el auto despavorido del estacionamiento.

—Tal parece que Kat tenía razón —dice Fin.

— ¿Quién era esa mujer? —pregunta Kat.

Carisi se acerca al televisor. El rostro de la mujer no es visible.

—Fin, Pheobe, ¿la reconocen? —pregunta Carisi.

—No —dice Pheobe.

—Jamás la he visto en mi vida —dice Fin.

—Bueno, tenemos su número de matrícula así que eso nos da algo. Kat, investiga la matrícula de ese auto.

—Enseguida —dice Kat y sale de la oficina.

—Rollins, quiero que vayas al despacho de Sandra e investigues a los trabajadores, clientes o quien sea que pudo haber tenido un motivo para hacerle esto —dice Olivia.

Fin se levanta.

—Iré con Rollins —dice.

—Fin, pero tu luna de miel...

Él mira a Pheobe.

—Haremos primero esto, se lo debemos.

Pheobe asiente.

—Debo ir a casa. Te veré después —le dice a Fin—. Gracias por su ayuda —les dice a todos.

—Te acompaño, debo ir a casa también. Si me necesitan, llámenme —dice Carisi.

Antes de salir mira rápidamente a Amanda y se va detrás de Pheobe.

Rollins y Fin se van también un poco después al despacho de Sandra, a reunir lo necesitado.

Cuando vuelven a la estación está Kat hablando con la capitana.

— ¿Obtuvieron algo? —pregunta Beson a Fin y Rollins.

—Nada más que una larga lista de clientas molestas por no conseguir un lugar para su boda en pandemia. Llevará horas investigarlas a todas. Sandra era muy popular —dice Fin.

— ¿Supieron de quien es el auto?

—Andrews McGavin. Pero nada del nombre de la mujer. Incluso ingresamos el nombre del hombre al sistema y nada.

— ¿Andrew McGavin? ¿Qué no es aque ricachón hijo de James McGavin uno de los inversionistas más reconocidos de la bolsa? —dijo Fin.

— ¿Andrew es inversionista? —preguntó Olivia.

—Su padre lo era —dice Amanda—. Andrew es sólo un hijo de papi que mal gasta la fortuna de su padre.

Olivia la mira confusa.

—Salió en un reality show —puso los ojos en blanco—. Y estoy segura haber leído su nombre en la lista de clientes.

Amanda rebusca en su teléfono.

—Aquí esta. Amber Laren y Andrew McGiven. La fecha y lugar era misma de Fin y de Pheobe.

Todos se miran sorprendidos.

—Bien. Vayan por Amber y traíganla aquí. Interroguen también al prometido, debe saber algo sobre su prometida y sino estará por descubrirlo ahora.