-¿Que sucede?- Steve reconoció mi mirada perdida.
-Strocker murio- Respondía indiferente.
-Pense que te sentirías mejor- Soltó.
-Estoy mejor, desearía ser yo quien lo hubiera asesinado- Hablé entre dientes.
-Mary- Habló en voz baja a nada de soltar un sermón de valores que había perdido hace tiempo.
-Bucky esta a la libertad, más libre que nada, esta cavando su tumba...guardando un espacio para mi- Susurre al final.
"El día que mueras, la tierra me dejará respirar bajo de ella hasta el final de mis días"
-Sam nos esta ayudando a encontrarlo, no hay rastro de el por ningún lado- Informó evitando la mirada de los demás colocándose frente a mi.
-No quiero seguir molestando a tu amigo, no encontrará nada...Bucky decide cuando salir y que exponer ante las investigaciones a el- Lo miré con una expresión de cansancio.
-Encontramos algo, y lo derrotaremos...juntos- Me miró sujetandome de las mejillas.
Espero a que asintiera con la cabeza para dejar un beso en mi frente y después despegarse de mi.
-Cap- Saludó Tony abriendo mejor espacio entre nosotros.
-Comenzare a dar indicaciones al equipo, los espero en unos minutos- Habló entendiendo que necesitabamos más privacidad.
-¿Puedo pedirte un favor?- Preguntó.
-Pedirme un favor no es ordenarme- Reía caminando a la pequeña mesa cogiendo mis armas necesarias.
-Solo necesito que nunca apagues tu radio ¿Si? No quiero perderte en medio de la batalla- Pedía siguiendome.
-No he dicho un si aún, trataré de no perderme- Bufé guardando dos dagas pequeñas en mi chaleco antibalas.
-¿Quien es Bucky?- Preguntó fríamente.
Pare de hacer todo mirando al frente guardando silencio en una expresión audible.
-Un antiguo compañero, eramos muy cercanos- Respondía.
-¿Tienes miedo de enfretarte a un compañero?- Preguntó irónicamente.
-Tengo miedo de quebrantar mis limites con el- Respondía.
-No deseo hablar del tema, no hay nada que buscar- Lo miré seriamente tocando su mejilla suavemente.
-Esta bien- Murmuró dejando un beso en la comisura de mis labios.
El jet comenzó a decender lentamente.
-Hey ¿Seguro que estarás bien?- Nat se acercaba a Banner.
-Si, estaré en un lugar seguro...Espero y no haya un codigo verde- Reía nerviosamente jugando con sus manos temblorosas.
-Bien, tenemos a Verónica aún- Informó Tony.
-Yo primero, después tu- Me Indicó Steve.
-¿Que? ¿Que dices? ¡No te escucho!- Reía abriendo la enorme compuerta haciendo una rampa para saltar.
-Mary- Se había molestado.
-¡Lo siento! ¡No puedo escucharte!- Gritaba acercándome cada vez más al filo de caer.
Miraba al frente por unos cuantos segundos teniendo la sensación de adrenalina recorrer dentro de mi provocando que las emociones se juntarán haciendo pequeños recorridos eléctricos por mi piel.
Mi cabello se golpeaba entre si dejando varíos mechones golpear mi rostro.
-¡Nos lanzaremos los dos!- Gritó Steve corriendo hacía mi sujetandome de la cintura.
-¿Que?- Fue lo único que alcancé a decir antes de dejar de pisar comenzando a volar.
-¡Eres un imbecil!- Gritaba molesta.
-¡Hay cosas que no se pueden cambiar!- Gritó.
Fue ahí cuando entendi, que estaba bien no siempre seguir tus propias reglas, lanzandose a algo nuevo sin tener miedo a las consecuencias.
Gritabamos en medio del aire como dos locos perdidos en el universo oscuro, pero los dos eramos dos estrellas inseparables.
