La Mansión Malik -Zayn Malik

Capitulo 7

Narra Selena:

 Me levante de un salto cuando mi espalda toco la cama, dolía mucho, el dolor más grande que he sentido en mi vida, caí en el suelo llorando, porque tuve que aceptar esa tonta apuesta, seguía llorando desconsoladamente y recordé unas palabras que una vez mi papá me dijo antes que muriera “Si todo se ve mal, no llores mi princesa, se fuerte, no caigas, mantente firme y si te tiran al suelo, levántate con orgullo y no te des por vencida, porque las princesas como tu son las que luchan y siguen hasta que la tormenta siga su curso” , lo que hice fue lloran más, pero es un consejo que lo pondré en práctica, me levante con la fuerza que pude mi espalda aun dolía pero no me daré por vencida seguiré firme hasta que pueda salir de aquí.

 Tome la ropa que zayn me había dado, salí con cuidado no quería que zayn me arruinara el día, fui a la habitación de al lado quería darme un baño así podría quitarme algo de estrés, abrí la puerta y apreté los labios, por favor que no rechine, y como la vida me odia la puerta rechino un poco todo está en mi contra sin duda. Entre y cerré la puerta rápido, suspire frustrada llevo aquí 3 días (y ya vamos por el capítulo 8) y tengo ganas de salir y nunca regresar ni aunque me paguen. Comencé a desvestirme y hacia muecas de dolor con cada roce de la camisa con mi espalda, retire el short con facilidad, me dirigí al espejo de la vuelta mi espalda estaba mejor que ayer aunque la que estaba cerca de mi hombro estaba más abierta sin duda ese fue el quinto, con solo recordar la cara de satisfacción que zayn tenía al verme así hacia que todo mi cuerpo le entrara un adrenalina que quería utilizar para matarlo, pero recordé que casi está muerto y se me pasa. Tome la toalla y la enrolle en mi cuerpo, tome la perilla del baño y entre en este, la cerré con cuidado no quería que zayn venga y me de otra tunda.

Salí del baño mejor pero el dolor seguía en su lugar, debo ser fuerte si quiero seguir de pie me senté en la pequeña cama y mis ojos se aguaron odio los sentimientos, mi manos fueron a mi cara secar las lágrimas y comencé a tararear la canción que mi mamá siempre me cantaba cuando estaba llorando, comencé a cantarla en voz baja.

-No, sin dolor no hay ganador, todo cuesta un valor por el cual hay que luchar a pesar de tropezar…-seguí cantándola.

Narra Zayn:

 Caminaba en dirección a la habitación de Selena, tome la perilla pero algo me detuvo cuandoiba a entrar escuche una linda melodía, pegue mi oído a la puerta y escuchaba aquella hermosa y tierna voz. “Si, lo sé a veces hay que ser golpeado para poder crecer y alcanzar un poco más de madures porque no habría forma de saber manejar lo que vendrá! Y aunque el dolor en esos tiempos puede ser tan cruel…” me separe de la puerta, se nota que esta triste, pero a mí que me importa abrí la puerta y ella me miro sus ojos estaban rojos, pero porque sentí tan culpable.

-Levántate tenemos que seguir- Dije y ella asintió se levantó y comenzó a caminar.

Comenzamos a caminar en dirección a la escalera y vi como su vista se concentraba en la puerta la volvió a bajar y escuche como sollozaba, llegamos a la biblioteca y ella entro primero.

-Te gusta el piano –Dije rompiendo el silencio, ella me miro y asintió para luego bajar la cabeza, parece una niña pequeña cuando la regañan por hacer algo malo-Te parece tocar un momento –Estaba siendo lindo con ella, este no soy yo que me pasa (Típico siempre llega el que despierta cosas que ni sabíamos que existían) ella negó- Oh vamos un ratico –Me volvió a mirar y asintió. Fuimos a una puerta que estaba dentro de la biblioteca- Que recuerde mi mama siempre tocaba para que sonriéramos –Dije y con recordarla me sentí tan mal-Sabes algo yo no recuerdo nada –Ella asintió-Habla, no como-Dije en tono chistoso pero ni un sonrisa se asomó, me tiene miedo.

“Quien no te tendría después de hacerle eso”

“Callate y adiós”

“Adios zayn”

Como odio esto, quite la sabana haciendo que mucho polvo se esparciera en el aire.

-Ven toca algo-Se sentó algo alejada de mí, mi boca soplo sobre las teclas blancas y más polvo se levantó asiéndola estornudar, sus manos fueron a una tecla y la otra igual. Esa melodía la conocía a la perfección. Sus ojos se cerraron y comenzó a tocar, yo la veía atentamente y una lágrima salió de su ojo y segundos después una cascada brillante corría por sus mejillas, lleve mi mano a su mejilla y las limpie ella seguía concentrada en aquella melodía, sus dedos acariciaban aquellas teclas haciendo que su sonido fuera dulce y a la vez lleno de dolor.

 Al terminar de tocar me miro y me sonrió, se ve perfecta cuando sonríe, se puede saber que me pasa, porque estoy actuando así este no soy yo, Pero se siente bien. Yo lo intente pero no salió como quería, el sonido era horrible necesito práctica. Tomo mi mano y es raro nunca me dejo tocar, llevo mi dedo índice a una tecla haciendo que el sonido saliera dulce como ella, que estoy diciendo.

 Nos encontrábamos tocando una melodía que no conocía pero ella me ayudo aprendérmela y ahora estamos tocando como unos artistas, se escuchaba algo dolorosa esa melodía pero era hermosa, mi mano choco con la suya y me miro, sonrió de una manera tierna me siento raro pero a la vez feliz, nunca me he sentido así, mire sus labios me entraban ganas de besarla, pero que me pasa, tal vez esté actuando así para cuando le tenga confianza se quiera escapar, mi mente se imaginó todo eso he hizo que mi cara cambiara, ella se asustó y se separó aún más, tome su brazo y la tire al piso y me monte encima de ella.

-Que pretendes hacer-Dije mirándola con odio.

Narra Selena:

 Solo quiero llevar la fiesta en paz, quiero llevarme bien con él y se molesta por eso.

-Que pretendes hacer –Me pregunto con odio

-De que hablas –No quería llorar pero si seguía en esto lo iba hacer.

-No te hagas que quieres hacer, ganarte mi confianza y después escaparte jajaja, esa ya me la sé –Dijo con tono de burla, el piensa eso, pues es un idiota sí que lo es.

-Solo quiero estar sin peleas!! –Le grite y recibí una cachetada

-A mí no me grites mira que puedo hacer contigo lo que quieras –Como te odio

-Suéltame te odio! Te odio! Te odio! –Y comencé a llorar-Suéltame ya! –Le ordene y no se movió.