FEEL ME

CAPITULO 2

El trayecto se me hizo corto, cuando bajé del taxi y cogí mis maletas me dirigí al interior del aeropuerto. Nada más llegar a la entrada de embarque me encontré con la persona que menos quería ver, con la persona que me arruinó, de la persona que quería mantener lejos de mí, pero mi familia se empeñaba que estuviera con él, por su estatus, pero ellos no veían como era en realidad y era un completo capullo, ahí esta mi ex novio para mí pero para mi familia sigue siendo mi novio Erick Berg, el único hijo de Marcus Berg uno de los empresarios más exitosos de todo el país, es amigo de mi padre desde la facultad , los dos provienen de familias adineradas y para ellos siempre ha sido todo mucho más fácil, mi padre me obligó a salir con él por su familia y así las dos familias se juntaban y eran más poderosas que cualquier otra, pero yo no quería estar con él, no después de lo que me enteré y de lo que hacía el famosos Erick Berg, tenía una cara hacia sus padres y otra hacia los demás, con sus padres era el chico bueno y un modelo a seguir, pero cuando no estaban ellos delante....era el mismísimo demonio.

-que haces tú aquí- le pregunté sin dar más rodeos, no sé qué narices hacia aquí, le deje bien claro que no quería saber nada de él.

-sabía que te ibas a ir hoy y quería despedirme de ti-digo con ese tono de amabilidad fingida.

Erick era muy elegante al igual que su padre, llevaba una camisa blanca y unos pantalones de vestir, parecía que venía de una reunión o algo importante, era moreno y corpulento, tenía los ojos verdes y la verdad que todas las chicas de la cuidad estaban locas por él, ya fuese por lo guapo y atractivo que era por el dinero que manejaba su familia.

-te dije que me dejaras en paz, se quién eres realmente Erick y no creo que a tu padre le hiciera mucha gracia saber lo que se ¿no crees?

-mira Rachel, mantén esa boquita cerrada, sabes perfectamente que no te conviene abrirla, los dos sabemos por qué -dijo agarrándome del brazo fuerte.

-suéltame, no te vas a salir con la tuya-dice quitándome de su agarre y dándole el billete a la señorita que había en la entrada de embarque para poder subir al avión.

-te arrepentirás Rachel, esto no ha acabado- dijo gritando mientras me alejaba de él.

No pude ocultar mis pensamientos y mientras me dirigía al avión me sumergí en ellos...

"-hola soy Tyler, encantado- me dijo un chico moreno, de piel morena y ojos pardos, cerré la puerta de mi taquilla y le sonreí.

-hola soy Rachel, encantada de conocerte-le saludé con una sonrisa y a continuación con dos besos.

-soy nuevo y no conozco prácticamente a nadie y te he visto aquí sola y bueno quería saludarte.

-lose eres Tyler Erickson, sé que te alojas en la casa de los Berg.

-si...-dijo sin mucho entusiasmo, noté como no quería evitar hablar de los Berg, y no entendía por qué si eran unas personas maravillosas.

-bueno te enseñaré el instituto, si te parece- le dije con una sonrisa.

-pues claro, además quien no querría que le enseñaran el instituto una chica tan guapa como tú-dijo con una sonrisa, me ruborice y me puse nerviosa al instante.

-venga vamos entonces-volvió a decir agarrando su mochila por un asa.

Le enseñe todo el instituto, sus aulas, donde estaba cada clase a las que tenía que asistir hoy, el campo de atletismo, los vestuarios e incluso las canchas de baloncesto.

- ¿Qué puedo hacer para entrar en el equipo?-me pregunto.

-pues primero tienes que hablar con Erick Berg, él es el capitán, pero si quieres hablo yo con él no hay ningún problema.

- ¿Es tu novio o algo similar? - me pregunto sin mucha importancia

-si lo es, llevamos casi toda la vida juntos, sus padres y los míos son muy buenos amigos asique siempre hemos estado juntos- respondí lo más sincera que podía.

-solo te diré una cosa, no te fíes mucho de él solo digo eso-dijo dejando su mochila en el suelo y sentándose en las gradas del gimnasio.

- ¿A qué te refieres? - le pregunté intrigada.

En ese momento apareció nada más y nada menos que Erick Berg dando un portazo y viniendo directo hacia nosotros furioso.

-¿Qué haces con ella?-le preguntó a Tyler.

-solo me estaba enseñando el instituto, no hace falta que montes una escena-le respondió Tyler con el mismo tono.

-te lo advierto Tyler no te acerques a ella o si no...

-o si no que Erick.

Erick se acercó a Tyler con las manos echas puños.

-o si no te las veras conmigo, no me retes Erickson- se separó de él y me rodeó la cintura con su brazo.

-vamos rech tenemos clase.

Dicho eso me dirigió hasta fuera del gimnasio y fuimos a la clase que teníamos juntos. No pude evitar pensar en todo lo que había pasado, pero sobre todo en lo que me dijo Tyler de que no me fiara de Erick, ¿A qué se refería con eso?, de todas maneras, lo descubriré...."

Sin darme cuenta ya había llegado al interior del avión, busqué mi asiento y me senté, ese día el que había recordado era el primer día que conocí a Tyler, justo ese día ese momento cambió mi vida, con ese simple hola, pero tuvo que venir Erick a arruinarlo todo....

Cuando el avión despegó y pude utilizar el móvil, me metí en mi galería y vi las fotos que tenía con Tyler, mientras las miraba recibí un mensaje de una de mis mejores amigas Amy Olsen, hacia mucho que no hablábamos desde que ocurrió.

Ella era mi mejor amiga siempre estábamos una en casa de la otra, nos conocíamos desde el jardín de infancia y nunca nos peleamos, hasta en nuestro último curso del instituto....

"- me da igual Rachel, tenemos que ir-me dijo muy convencida

-no vamos a ir Amy, yo desde luego que no.

-vamos rech, o que pasa ¿Te vas a quedar con Tyler? - me pregunto de la nada

-pero a ti que más te da si me quedo con él o no, no está bien Amy, y no pienso dejarle solo-le respondí dando media vuelta y volviendo por donde habíamos venido.

-tú sabrás rech pero te estas aliando con el enemigo-me digo a lo lejos, no la hice caso y seguí andando."

Mire el mensaje y decía:

"no puedes escapar de lo que paso, tienes toda la culpa"

Apagué el móvil y lo volví a meterlo en la mochila, ella sabía en el fondo que yo no tuve la culpa y nunca la había tenido, pero claro eso que dicen que el amor te ciega... es verdad y hay tenemos la prueba, Amy estaba cegada nada más y nada menos que por Erick Berg.