𖦆 ֺ ָ ֙ capítulo cuatro

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"debemos tener un gato, así lo proclamaremos nuestro hijo."

esas palabras se repetían en las cabezas de yasu, lo consideraba tierno pero no sabía porque aquel tipo se lo decía. sin olvidar que había contacto físico, mucho contacto físico al que la fémina no estaba acostumbrada.

- bien jovencita, usted solo tuvo un desmayo, lo cual hizo que todo su peso cayera de mala forma en su mano. Primero no me había dado cuenta ya que usualmente los golpes suelen ser en la cabeza o espalda, asi que por eso anteriormente dije que estaba bien, lamento eso. - dijo la enfermera preocupada ¡que gentil es! La señorita hizo una leve reverencia ante el "mal cuidado", según ella, que le había brindado a la más joven.

- ¡no se preocupe! como dijo usted, no es usual que sucedan este tipo de "lesiones". - dijo algo sonrojada la oji café, la cual hacía las comillas con sus dedos.

- está bien, dejeme hacerle un vendado en la muñeca, necesito que el sitio esté sin ningún movimiento. esto será por lo menos 2 días, ¿bien? - dijo la mayor dándole una linda sonrisa. ¡que hermosa era!, yasu de sonrojo a más no poder, no le gustaba de forma romántica ni nada de eso, ya que sabía que eso era pedofilia y le disgustada. su sonrojo era debido a lo hermosa y amable que era aquella señorita.

- esta bien... muchas gracias por la preocupación, debo irme a clases. - dijo la pelinegra bajando de la camilla, cuando iba a tomar la manilla de la puerta, la enfermera algo confundida la llamo.

- eh.. las clases ya terminaron, estuviste casi toda la mañana desmayada. eso me hizo pensar que tenías algún daño en la cabeza pero al parecer esta en lo incorrecto. - al escuchar las palabras, la ojo café quedó en blanco. Las clases habían terminado y ella solo asistió a dos de ellas y para agregar, llegó tarde. no sabía que iba a hacer, no tenía amigos en su salón y dudaba que alguien se los prestara, después de todo era alguien muy reservada.

- ah si, una chica te vino a ver. era... ¿hinata? - dijo ella algo confundida por no recordar el nombre.

- ¿podría ser hinata tachibana? - dijo ella mirando a la mayor, la contrario soltó un "oh" y asintió con una sonrisa en su rostro.

- si, ella misma. dijo que pudo conseguir los apuntes de tus clases, tus profesores saben que eres buena estudiante y que quedarías algo atrasada con lo sucedido, así que hicieron copias de las clases y se las entregaron a ella. - dijo la pelirosa, mantenía su amigable sonrisa en su rostro, vaya mujer mas hermosa.

- ¡muchas gracias! espero tenga un buen día, nos vemos. - dijo yasu para luego retirarse, la señorita de la enfermería era amable.

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Hinata tachibana y yasu Ito se conocieron gracias al hermano de la primera chica, el cual un día común, estaba siendo intimidado por un grupo de delincuentes pre-adolescentes, la fémina al ver esto se interpuso ante una golpiza que iba dirigida al pequeño oji azul. detuvo el golpe y se posicionó delante de él pelinegro, protegiondolo. tenía un semblante serio, ella era mayor que aquellos niños pero eran mayor cantidad que ella.

- ey, malditos mocosos, ¿no tienen algo mejor que hacer que están atormentando a alguien inofensivo? - decía seria, se mostraba algo de irritación en su voz, pero no haría nada fuera de lugar, si es que los ajenos no intentaban nada.

-¿quién diablos eres?, esto es entre el niño y nosotros, no te metas. - decía uno de los chicos, el cual trataba de parecer amenazante ante los ojos de la pelinegra.

- ¡ja! eres un niño pequeño, ¿que conflicto tendrían con el? ¿acaso les saco la lengua? - la oji café soltó una risa arrogante para luego volver a su mirada intimidante. - ya les dije, déjenlo en paz, así todos quedamos felices y contentos. - prosiguio, no quería tener que recurrir a otra medidas algo violentas, pero no permitiría que siguieran molestando a aquel pelinegro.

𝗍𝗐𝗂𝗇 𝖿𝗅𝖺𝗆𝖾𝗌 ; 𝖼𝗁𝗂𝖿𝗎𝗒𝗎 𝗆𝖺𝗍𝗌𝗎𝗇𝗈 Where stories live. Discover now