Extra 11: AoFuta

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ATENCIÓN

Después de la nota final, hay un pequeño extra.


Desde el minuto uno en que empezó a relacionarse con aquella panda de amantes del voley -él incluido- supo que sufriría en el proceso

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Desde el minuto uno en que empezó a relacionarse con aquella panda de amantes del voley -él incluido- supo que sufriría en el proceso.

Y tuvo que sufrir viendo la muerte de Kageyama.

Él era un tipo duro, pero en realidad era más blando que un algodón.

No quiso venirse abajo delante de todos en el funeral, pero alguna que otra lagrimilla se le escaparon de sus ojos. Por otro lado, en la intimidad de su casa, se permitió sentirse todo lo deprimido que pudiese teniendo a su gran hombre dándole todo el apoyo que necesitaba.

Pero, ¿para qué deprimirse? Habia que cerrar ese capitulo y abrir otro nuevo aunque fuese complicado.

No había tiempo para estar bajo de ánimos cuando la cosita más bella de la faz de la tierra estaba delante de él.

Su pequeño bebé, Ichiro, estaba con ellos.

Todas sus energías tenían que estar enfocadas en él. En amarlo. En cuidarlo. En brindarle toda su atención porque su pequeño era lo más importante en ese mundo.

Lucharía por él.

Sacaría las garras contra quien se atreviese a decirle algo malo a su pequeño tesoro.

Y sabía que en algún punto de la vida de su pequeño, lo tendría que hacer. Porque todas las madres sabían que su hijo es especial desde que lo ve por primera vez.

Y Futakuchi supo que Ichiro no era igual que el resto de los niños.

La primera vez que se dio cuenta, fue aquella vez cuando fueron a comprar a una juguetería el regalo par el cumpleaños de Akihiko.

Ichiro iba caminando agarrado del carrito donde iba su hermanito menor, Jiro, de casi tres años, mientras él lo empujaba y resoplaba algunas veces por los golpes que le daba su futura primera hija.

Miraban por los pasillos de aquella enorme juguetería el regalo perfecto que poder regalarle sin éxito alguno.

Habían visto coches, dinosaurios, figuras de acción, bloques de construcción... Incluso habían mirado algún juego de mesa sin obtener resultados.

Comprarle un juguete a un niño a veces era complicado. Y para regalarle ropa, Asahi ya se molestaba en hacerles algo a todos los pequeños y no tan pequeños sin recibir nada a cambio.

Siempre fuiste tu (AtsuHina) EDITANDOWhere stories live. Discover now