Capitulo 23

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Después de caminar juntos de la mano, entre risas, miradas y anécdotas, finalmente nos encontrabamos frente a la entrada de mi preparatoria. Di un gran suspiro y mire todo a mi alrededor. La puerta principal era grande y de color azul. Decenas y decenas de jovenes de diferentes tamaños y edades entraban de prisa. Se podia ver todo tipo de rostros y expresiones, se notaba que algunos tenian mucho miedo y se sentian nerviosos con solo mirar su rostro. Mire a Oliver y me di cuenta que también miraba todo con atención. Regrese mi mirada a la entrada, volví a suspirar y abrace a Oliver.

- Voy a echarte de menos.- Dije y me aferre a su cuerpo.

- Ratoncita... Debes entrar o si no te dejaran afuera. Ve, corre. Me quedare aqui hasta que cierren la puerta.- Dijo mientras besaba mi frente.

- Esta bien. Te veré mas tarde. Te amo.- Dije triste.

- Te amo ratoncita. Mucha suerte. Ve e ilumina a todos con tu encanto!!

No pude evitar sonreír y me gire para entrar a la escuela. Camine hacia la entrada y me quede de pie, inmóvil unos segundos. Voltee para mirar a Oliver por ultima vez y me despedí agitando la mano. Tome valor y finalmente entre.

Lo primero que note fue el gran patio. Había una fuente enorme en medio y unas areas verdes muy bonitas y cuidadas. Mire hacia el edificio y no era muy grande, pero tenia muchas ventanas y lucia muy elegante.

Mientras caminaba para llegar a mi aula no pude evitar sentirme triste al pensar en Oliver. Me hubiera gustado demasiado tenerlo aqui conmigo pero no me quedaba otra opcion mas que resignarme. El iria a un instituto en Suecia una vez que llegaran allá. Note como mis ojos se cristalizaban y trate de pensar en otras cosas para no llorar. No queria ser el hazmerreir por llorar en mi primer día de clases.

Seguí caminando por los pasillos hasta que encontre el aula 202. Entre y vi a varias personas sentadas en los pupitres. Aun no se llenaba por completo, así que decidi sentarme hasta atrás, como solia hacer siempre. Tome asiento y me limite a mirar por la ventana. Sonó el timbre y muchos alumnos corrian en busca de un lugar donde sentarse. Cuando menos me di cuenta, el salón estaba lleno. Mire hacia el pupitre que estaba a mi lado y había un chico sentado. Tenia el cabello castaño oscuro, casi negro. Usaba lentes y parecia no estar de buen humor, ya que refunfuñaba y gruñia sin importarle que los demás lo vieran. No le di importancia y saque mi cuaderno para empezar a escribir lo que el profesor ponía en la pizarra.

- No veo bien ¿Me puedes decir lo que esta escribiendo el profesor?- Dijo el chico de lentes de mala gana.

- ¿Porque no pides que te cambien de lugar para que puedas ver mejor?- Dije seria.

- ¿Crees que no lo hice? Claro que lo hice, pero el profesor dijo que primero teniamos que seguir la rutina, presentarnos, y esas tonterías.- Gruño.

- Puedes copiarlo de mi cuaderno cuando termine.- Dije molesta.

El chico me miro de arriba a abajo e hizo un gesto de enfado.

- Bien. Como sea.- Dijo mientras se quitaba los lentes para limpiarlos.

¿Quien diablos se creía? No podía llegar y hablarle así a la gente. Me enoje bastante y segui escribiendo.

Al terminar la clase le pase el cuaderno para que copiara los apuntes.

- Cambio de planes. Le tomare una foto a los apuntes y los hare en casa. No estoy de humor.- Dijo arrogante.

Y así fue en todas las clases siguientes. Tuve que soportar sus comentarios malos y sus quejas. Estaba harta. Menos mal sono el timbre para el receso y sali corriendo de ahí. Camine esquivando a toda la gente hasta llegar a la fuente. Me sente y me dispuse a comer. Me sentia sola, así que le mande un mensaje a Oliver.

Visiones de amor ✨✔Where stories live. Discover now