YOU

Capítulo 2

Apenas se adentró en los vestidores cuando percibió el fuerte aroma que le provocó náuseas; humo de cigarro y sudor eran la mezcla indicada para querer salir corriendo del lugar.

–¡Tú! —le llamó el entrenador Tomlinson entrando a los vestidores haciendo que el olor a cigarrillo se intensificara— Alístate, ya están todos en el área y por ser nuevo tienes que hacer algo así como una iniciación.

La tranquilidad con la que el ojiazul le hablaba a Harry simplemente lo hacía dudar cada vez más de que estar ahí fuera buena idea.

¿Qué clase de iniciación?

Ahora estaba más aterrado que cinco minutos atrás, sea lo que sea que tenga que ver con esa "iniciación" sería malo para él, lo sabía.

Obedeció y sin tener el conocimiento necesario se envolvió las vendas en las manos para finalmente cambiarse el pants por el short deportivo y salir al área de pelea, que era donde se encontraban todos.

Caminó inseguro y se colocó en la fila junto a sus compañeros; eran cuatro chicos además de él y el entrenador.

–Bien chicos —habló Louis comenzando a caminar frente a los jóvenes ya formados—, como podrán ver tenemos a un nuevo... individuo —dijo con aversión mientras miraba a Harry de pies a cabeza—. Por lo que tendrá que pasar por la pelea de iniciación.

–¿Qué pelea de...? —habló un chico teñido de rubio y rastros de castaño en algunas partes de su cabello, pero se vio interrumpido por Louis.

–Luke, he dicho pelea de iniciación —indicó con autoridad—. Y tú serás el primero, así que sube al ring.

El chico hizo lo que el entrenador dijo, no muy convencido, mientras esperaba a que diera más indicaciones.

–¡Tú! —exclama Louis mirando a Harry nuevamente— ¡Sube ahí!

–¡No voy a pelear con él! —replicó el ojiverde— ¡No sé hacerlo!

–¡Y menos lo sabrás si te quedas aquí llorando como nenita y no lo intentas, así que ahora muévete y sube ahí!

Sin más que decir, Harry obedeció y nervioso, subió con dificultad al cuadrilátero.

–¡Peleen! —ordenó Louis cuando apenas se habían posicionado.

Harry solo había visto algunas peleas de boxeo en televisión, pero definitivamente no sabía nada al respecto. No sabía cómo tenía que colocarse, como acomodar sus brazos, sus piernas, no tenía idea de cómo soltar un golpe y no sabía si al menos iba a poder esquivarlos.

Le lanzó una mirada suplicante al tal Luke, quien solo bajó la mirada y mordió el piercing negro que se encontraba en su labio inferior.

El chico le advirtió que le lanzaría el primer golpe señalando la mano izquierda con la mirada y Harry inmediatamente lo esquivó.

Hizo lo mismo con los siguientes dos golpes, por lo que Louis soltó una carcajada llamando la atención del resto de los chicos que los miraban.

–¡Vamos, Luke! —le animó— Puedes hacerlo mejor, y por tu bien más te vale que así sea.

Luke miró apenado a Harry mordiendo nuevamente su labio inferior. Harry sabía que él no quería golpearlo, pero también sabía que tendría que hacerlo.

El primer buen golpe fue a su estómago, posterior a ese uno en sus costillas para hacerlo caer al piso de un puñetazo en la mandíbula.

Su estómago ardía, pero el dolor de su rostro era el más intenso; se sorprendió de lo fácil que le fue ponerse de pie, más sin embargo, el golpe que recibió apenas se recuperó, lo hizo caer de nuevo y esta vez provocó que el labio le sangrara un poco.