Capítulo 17

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Después de una gran discusión que no llegó a nada más que un par de miradas llenas de orgullo, Logan pudo conducir después de salir de la casa de los padres de Reid. Lo necesitaba, no podía explicarlo, pero si no se concentraba en conducir, su mente iba a volverse un desastre allí adentro. Era horrible esta sensación que le estaba cubriendo el cuerpo mientras más cerca estaba de su padre. Las palmas de sus manos estaban sudando mientras las aferraba alrededor del volante. 

No se había sentido así en años. Muchos años.

Era como se sentía cuando tomó el dinero que tenía y huyó de casa para no volver a ver a su familia otra vez. Era algo cercano al miedo y entre el nerviosismo de una decisión dura que tendría consecuencias. En ese entonces, lo único en su mente era salir de las garras de su padre y finalmente ser libre y tomar sus propias decisiones. 

No le temía a su padre, en todo caso. Era algo más parecido a repudio y odio. Sentía que apenas que sus miradas se encontraran, el ambiente se volvería tan tenso que iba a querer a Reid tan lejos de ahí como fuera posible. Todavía no le gustaba esa parte. No sabía qué estaba planeando su padre y poner a Reid allí parecía una terrible idea.

Podía imaginarse la mirada de los chicos juzgándolo por poner a su pareja en un posible riesgo. Apretó los labios mientras hacía una mueca. Mhm, esto era una mala idea.

Le dio una rápida mirada a él, que estaba en el asiento de al lado tomando una siesta. Se había tomado toda la mañana para trabajar sin tomar un descanso, así podría estar con él todo el tiempo. Era adorable que pensara de esa forma. Sonrió y estiró la mano hacia él para acariciarle el cabello.

Tanto como todavía conservaba su orgullo dominante dentro de sí, que Reid lo cuidara tanto se sentía demasiado bien. Se mordió el labio con fuerza y bajó su mano de la cabeza antes de volver a ponerla en el volante. Ah, por un momento se había olvidado de hacia donde se dirigía.

Reid le ayudaba mucho con eso. Era bueno para distraerlo y era dulce y amoroso, también compresivo y sabía ponerlo en su lugar cuando era necesario. Tenía que admitir para sí mismo que a veces podía ser un poco altanero y engreído, pero al menos había alguien a su lado más que dispuesto a ponerle los pies sobre la tierra, usando cualquier método.

Y esa parte tampoco estaba mal.

Dejó escapar una gran respiración y fijó su atención al frente. 

Sea lo que sea que sucediera, su prioridad sería mantener a Reid a salvo.

***

No estaba sorprendido en lo mínimo al ver el tamaño del lugar. Era una gran mansión, tan ridícula y mimada como uno podría imaginarse. Los grandes muros de piedra se alzaban alrededor de la propiedad, dándole una gran privacidad para cualquier cosa que desearan hacer dentro. 

El guardia en la puerta lo hizo detenerse. Logan bajó la ventanilla del auto y los ojos del guardia se abrieron y le dio una reverencia. "Joven heredero, bienvenido."

"¿Mi papá está ahí?"

"Han estado esperando por usted, señor."

Logan asintió y miró hacia la casa. "Está bien. Voy a entrar."

"Sí, señor. Me alegra verlo después de tanto tiempo. Es bueno que esté bien."

"Gracias, Joseph. Digo lo mismo."

El hombre se alejó y Logan subió la ventanilla. "¿Lo conoces?" le preguntó cuando el auto volvió a moverse.

"Sí. Ha trabajado para mi familia desde siempre, creo. Es un shifter también, así que no tengo idea de qué edad tiene." Lo miró y le dio una sonrisa que decía que estaba intentando darle algo de confort en toda esta situación. "Es un buen tipo. Siempre me agradó. Tenía un hijo de mi edad, ahora que recuerdo." Ladeó la cabeza pensativamente. "No recuerdo su nombre, pero siempre estaba jugando por ahí."

Cómo Amar a un Oso. SPO#4Where stories live. Discover now