Matheo Riddle- "𝑨𝒎𝒐𝒓 𝑬𝒏𝒕𝒓𝒆 𝑺𝒆𝒓𝒑𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆𝒔" (En Edición)

[𝖢𝖺𝗉𝗂́𝗍𝗎𝗅𝗈 𝖨𝖷]

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N a r r a d o r H a r r y.

Todos estaban nerviosos ,en unos minutos llegaría Lyra a darnos las indicaciones por las cuales entraremos a la casa de Voldemort.

Los gemelos les daban ánimos a los demas con sus bromas, no se que haríamos sin ellos. En un abrir y cerrar de ojos se vieron cuatro cabelleras rubias, estos venían hacia donde estaba yo.

N a r r a d o r a L y r a.

Faltaban unos minutos para la guerra, necesitaba ir con los de la orden para darles las indicaciones necesarias.
Mis padres de encontraban nerviosos, y sobre todo, mi padre tenía miedo.

-¿Están listos?-Pregunte cuando nos reunimos en las afueras del la Mansión del Voldy.

-No, siento que esto es una locura-Contesto mi padre desorientado.

-¡Oh por Merlín!-Susurró mi madre molesta-¡Nunca apoyamos a nuestros hijos! Es nuestro deber hacerlo ahora, tantos inocentes murieron en la anterior guerra por salvar al mundo mágico. Mi sobrina junto con su esposo, ¿acaso no te acuerdas de Tonks?

Mi madre Sollozo a recordar a mi fallecida prima, como olvidar cuando presencié su muerte... ella y su esposo murieron juntos de la mano.

-Yo estoy listo-Habló mi hermano para cortar el ambiente incómodo.

-Entonces iremos mediante aparición, tenemos que aparecer un poco lejos... haríamos mucho escándalo- Respondi preparada para lo peor, habrian susurros malos sobre nosotros, nos harían señas obscenas. Pero si a los otros los perdonaron, ¿por que a nosotros no?

Juntos agarrados de las manos, como si fuéramos una familia feliz, llegamos a los terrenos de los Weasley.

Mientras que caminábamos hacia fonde estaba Harry, miradas, murmullos, señas. Algo normal en la vida de un Mortifago.

-Potter- Saludó mi padre, Harry correspondió su saludo con un apretón de manos.

-Señor Malfoy-Afirmo Harry- ¿Estas preparada Lyra?

-No estoy muy segura chicos, no quiero ser negativa pero... ¿y si perdemos?-Cuestione insegura, perdi demasiadas cosas en mi vida, pero no podría perder a mi familia e amigos.

-Esta vez lo lograremos, solo ayúdanos con esto-Respondió Hermione, sin dudas una de las más afectadas fue ella.

-Lo haremos- Afirmó mi hermano- Pero apenas termine esto, nos iremos lejos.

Sentí un nudo en la garganta por lo que dijo Draco, pero sin dudas era la verdad. Si nos quedáramos acá, lo primero que perderíamos sería el respeto. Muy pocos nos mirarían bien, los demás nos insultarian por ser Mortifagos.

-Vamos a hacerlo-Afirme segura de mi decisión.

Harry hizo una seña para que se reúnan todos. Entre toda la gente que estaba, logré divisar a mis amigos.
Ellos me dieron una sonrisa cálida, y me dieron fuerzas para poder hablar.

-¡Escuchen todos!- Hable con voz autoritaria- Nos dividiremos en grupos, cada uno de ellos irán con un Mortifago. Nosotros conocemos la mansión a la perfección. El primer grupo atacara a los guardias, tienen que ser hábiles, o podrán activar la marca.
Al atacar a los guardias irán hacia adentro, van a ver muchos mortifagos preparados para el ataque. Los únicos hechizos que ellos saben usar son las maldiciones imperdonables, así que cuidado, no queremos a ningún caído.
Cuando despejen la sala verán una escalera, ahí estarán mis padres, ellos los guiaran hacia el piso superior donde hay muchos Mortifagos.

-Así es, y luego yo estaré luchando contra Voldemort junto a Lyra y Draco-Continuo Harry- Hoy lograremos lo que no logramos hace unos años, por fin podremos recuperar la paz en el mundo mágico.

-Y por último y lo más importante-Me prepare guardando mi varita en la bota- No toquen las puertas que tienen una cruz roja.

Todos los de la orden aplaudieron y se colocaron en sus puestos. Lograron armar los grupos, y en cada uno de ellos había un Mortifago encargado de guiarlos.

Los Weasley se abrazaban con fuerza, se abrazaban por sí no volvían a verse nunca más.

Mis padres se sentian más seguros, me hizo tan feliz que incluso me saco una sonrisa. Mi hermano también estaba feliz, jamás creímos que Lucius Malfoy seria capaz de esto.

Unos minutos después comenzamos a ir hacia nuestro destino. Algunos quizás moriríamos, otros viviríamos. Y lo único que le pido a Merlín, que no muera nadie de los míos.

N a r r a do r O m i c e n t e.

Un grupo de magos honestos iban hacia la mansión del señor tenebroso. Un grupo que sabía los peligros de esta guerra, pero igual harían lo que fuera para que el mundo mágico vuelva a ser sano.

En la mansión del señor tenebroso, este se encontraba relajado mirando el periódico mágico. Al parecer, gente que se había borrado del mapa, apareció.

Sin dudas le pareció algo sin importancia, pero ¿por qué estarían todos de vuelta aquí?

El simplemente cerró el periódico y miró a su hijo sonriendo.

-Eres uno de mis peores castigos, pero igualmente te quiero-Le dijo con un tono de nostalgia.

Sin dudas, esto para Theo Riddle fue algo muy bueno. Su padre jamás le decía un "Te quiero". Pero al pasar los minutos se preguntaba ¿Algo le pasara a mi padre?

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Nota autora: Hola Gente bella, como podrán ver estamos a un capitulo de la guerra mágica. Venía a informarles que quizás suba otro capigulo por estos días, sinceramente me emociona lograr terminar este Fanfic. También quería agradecerles todo el apoyo que dan, y que me pone muy feliz despertarme los sábados y leer que esperan un capitulo con ansias. Muchas muchas gracias.

Saludos N.C