El gran Yiling Laozu ha muerto, pero con su muerte, otra persona ha muerto con él...
¿Qué pasará con Lan Zhan ahora que Wei Ying ha muerto?
-Él murió hermano y no pude hacer nada por salvarlo, pero buscaré a todos los que provocaron su muerte ....
La guerra había terminado hace unos dos meses, las sectas se preocupan más por tratar de reconstruir lo perdido que en rencores del pasado, hasta que cada anciano hizo acto de presencia en lo que era su secta de origen, el primero en aparecer con un cultivador fue el anciano Jin FuMin, todos los discípulos al verlo llegar hicieron profundas reverencias.
–Este chico, será mi elegido para ser el líder, en lo que el verdadero líder crece para tomar su posición en la secta– Mo XuanYu se colocó a lado del anciano quien le sonreía, eran pocos los del consejo de ancianos que no estaban de acuerdo, pero la mirada que les dio FuMin hizo que se tragaran sus palabras –A-Yu, tienes la bendición de los dioses, me podrás contactar directamente si algo no está yendo bien o si alguien te molesta–
–Agradezco ser elegido para ser líder– XuanYu hizo una reverencia hacia el anciano.
–A-Yu, tu alma, tu manera de ser, de pensar y de actuar era la correcta en lo que respecta a mi secta, me alegra que puedas llevarla a la gloria antigua con reputación intachable– los ojos de XuanYu se llenaron de lágrimas, los ancianos entendieron que habían hecho mal su trabajo, pero con este joven podrían regresar a lo que antes eran, recordarían todas las fallas que hubo con Jin GuangShan para evitar más tragedias.
–Mayor Jin, yo... no pertenezco directamente a Lanling Jin, pero me gustaría saber si puedo visitar a mi secta algunas veces–
–Claro que puedes visitar su secta en la villa Mo– XuanYu negó suavemente con una sonrisa en su rostro.
–Mi hogar se encuentra en los Túmulos funerarios, mi secta es...es la secta Wei– el tono de voz que había empleado XuanYu solo había demostrado orgullo y admiración por haber estado ahí, los ancianos al momento de escuchar como lo había dicho se miraron entre ellos, harían las cosas correctamente si querían que este joven líder y el que viene se sintieran igual de orgullosos por pertenecer a Lanling Jin. FuMin sonrió y acarició la cabeza de XuanYu.
–Tienes todo el permiso de ver a tu familia y sobre todo de ver a tus sobrinos–
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Jiang LiWan iba con un joven cultivador con túnicas lilas, todos los discípulos al ver a la anciana le hicieron una reverencia.
–He traído a mi elegido para ser líder– uno de los cultivadores lo reconoció puesto que era el joven que había anunciado que las mujeres y niños no fueran atacados, sin embargo ellos no escucharon y ahora su verdadero líder había fallecido –La secta Jiang, era una secta basada en glorias, justicias y hacer posible lo imposible, desafortunadamente sufrió daño tras daño y fue perdiendo sus valores, eso me decepcionó mucho– todos los cultivadores bajaron su cabeza sintiéndose mal con ellos mismos tras haber cometido cualquier tipo de atrocidad llegando a ser casi iguales a la secta Wen –Sin embargo creo que tenemos la esperanza de volver a ser una secta justa y correcta, con felicidad y amor–
–Mayor Jiang, todos nosotros lamentamos nuestra conducta y nuestra falta de valores al cometer esos actos de crueldad e inhumanidad– todos se arrodillaron ante ella por lo que sonrió y miró al joven que había sido seleccionado.
