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Era un día importante ya que Betty al fin volvería a Ecomoda, algo que de seguro tranquilizaría a Daniel quien estaba muy tenso desde el día que se enteró por completo del estado verdadero de la empresa y Mario había avanzado con su plan, ya que por lo menos ahora este lo miraba y lo saludaba así que ahora se encontraban esperando a que según Roberto, dejara de hablar por teléfono, ninguno en el lugar estaba preparado para lo que verían.
Apenas Betty cerró la puerta y habló con voz temblorosa todas las miradas se posaron en ella, en especial la de Daniel.

La junta empezó como si nada, hablando de la empresa y las acciones legales que se tomarían a continuación pero en la mente de cierto castaño solo habían preguntas, demasiadas preguntas.

"¿Esta mujer qué se hizo?
¿Armando sabía que podía estar así y dejaba que fuera fea?
¿Por qué Daniel no para de verla?
¿Será que le está gustando?
¿Ya me olvidó?"   

Mario estaba ensimismado así que para él la junta pasó rápidamente por lo que cuando todos se levantaron él lo hizo con prisa para alcanzar a Daniel en el pasillo pero fue llamado por su amigo así que con un suspiro volvió a sentarse a regañadientes viendo la sonrisa triunfante de Marcela que también salía del lugar.

En el pasillo Daniel estaba a punto de entrar al ascensor cuando su hermana se le acercó con una sonrisa.

-¿Tienes un momento?

El más alto asintió levemente mientras que se dirigían a la oficina de la azabache, ya dentro cada uno se sentó al frente del otro.

-Bueno ¿y ya estás más tranquilo?

-Pues si, por lo menos esa mujer no se va a robar la empresa, aunque tú ya sabes que opino de eso.

-Si lo sé, pero no vamos a liquidar la empresa, olvídalo, pero bueno, para que quites esa cara te voy a dar una buena noticia...me reconcilié con Armando.

La mujer sonrió contenta recordando los acontecimientos de unas noches atrás mientras que Daniel sonreía a boca cerrada sin muchas ganas.

-Ajá...¿y cuál es la buena noticia?

-Ay Daniel, es que no entiendes ¿cierto?, bueno tú que vas a entender si nunca te has enamorado.

La mujer volvió a reír pero ahora Daniel había ensanchado su sonrisa, pensando en cierto castaño que ocupaba sus pensamientos la mayoría del tiempo, no estaba seguro de estar enamorado, aún así lo quería mucho y aceptaba el esfuerzo que últimamente está haciendo para reconquistarlo es muy lindo, muy Mario Calderón, y claramente la situación no era nada parecida pero se sentía que esos pequeños detalles lo ponía igual de embobado como su hermana lo estaba con el expresidente así que simplemente negó con la cabeza cruzándose de brazos. 

-¿Tú que sabes? 

-Daniel...¿cómo así? ¿dejaste de ser un solterón?

El más alto enarcó una ceja viéndola con diversión por como se había expresado solo ladeando la cabeza riendo levemente pensando en si decirle la verdad, después de todo era su hermana, la más cercana a él y de un modo u otro siempre ha sido una de las personas en las que más ha confiado desde que tiene memoria así que después de tomar una bocanada de aire y soltarlo por la nariz, volviendo a mover su cabeza de manera afirmativa.

-Algo así.

-¿Y quién es? ¡dime Daniel, que no aguanto el suspenso!

A Daniel le agradaba ver a su hermana sonriente después de todo este sufrimiento que había pasado así que se incorporó inclinándose un poco hacia adelante pensando bien sus palabras.

¿Me? ¡¿Fall in love?! [Daniel x mario]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora