Apóstata de mi propia Fe

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Hola Diosito.

Soy agnóstico.

Puedo yo solito con todo mientras tanto.

Si me ayudas ahora creeré siempre.

Qué hipócrita que la fe sea conveniente.

Lo siento soy cínico.

Creemos lo que nos conviene.

No diré : "Dios ayúdame" en mi lecho de muerte...

Viviré ayudándome y si de paso te encuentro mejor.

Aunque creo que estás en mi interior y te llamas Amor.

No sé, los humanos somos traicioneros.

Chantajeó a Dios ahora mismo.

Mi fe era el amor y cometí apostasía.

Debí amarme a mi primero y amé a alguien más sin amarme.

Luego me quedé obviamente con nada.

Polvo soy. Cósmico. Y al polvo -cósmico- volveré.

Pido perdón de antemano...

Soy un apóstata de mi propia fe...

Coherencias Delirantes (EN PROCESO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora