Almas Gemelas - OmegaVerse Akalynn

Capitulo 14: Malas influencias

-AH! AH! AH! Sí! Mi amor! Ah... ahh...- Jadeaba la Kumiho con la lengua afuera al sentir las fuertes y rápidas envestidas de su pareja.

Kai'sa la tenía agarrada de su cola obligándola a moverse, una forma que no usaba a menudo pero que sabia que era de extremo placer para su pareja. - tan zorra conmigo, solo conmigo... ah... ah... se siente tan bien tu interior... ah... ah...

-Sí... Sí... Kai... Kai... solo tu zorra... por favor, no pares de follarme...- gritaba entre gemidos. - me calientas tanto, amor... ah... luego de pelear por mi... ah... no aguanto más... hazme lo que quieras... por favor, mi amor...

Kai'sa se inclinó y recargó todo su peso en el cuerpo de Ahri, clavando profundamente su sexo dentro. - quiero marcarte de nuevo... ah... ah... quiero imprimirme en todo tu ser... que nadie vuelva a pensar que no tienes dueña... no dejaré que nadie vuelvah... ah... cuestionar mis dominios... y eso... te incluye... ah... ah... ing...- gemía en la oreja que luego mordió con cierta fuerza. Le encantaba morderle la oreja y jugar con el aro que tenía en ella, el sonido del metal golpeteando contra sus dientes cuando lo movía de un lado a otro.

Las caricias y todas las atenciones que ponía la Alfa sobre su cuerpo la estaban volviendo loca, era algo normal que luego de una demostración de poder los omegas se sintieran mas atraídos a sus parejas alfas, jamás pensó que Kai'sa fuera un Portador. La hacía sonreír de placer y disfrutar aún más las atenciones y el amor en su ser.

-Ahri... mi zorrita de nueve colas... solo mía...- jadeaba Kai'sa entregada totalmente a su Omega, no era cualquier demostración de afecto. Cualquier alfa incluso el mas inocente disfrutaría de esa manera mientras gastaba la adrenalina que corría por sus venas luego de una batalla en especial por un omega y más aún si este era su pareja.

-Kai... Kai... sí... sí... no pares...- La kumiho tomaba de la cabeza a su alfa y mientras que con su otro brazo se sostenía en la posición, no le faltaba mucho para perder la fuerza y caer derrotada ante las envestidas y la fuerza.

-Te amo, Ahri, eres todo lo que quiero... y moriré antes de entregarte a alguien...- jadeó a sabiendas que estaba por acabar. La abrazó con fuerza y clavó sus caderas al sentir como bombeaba en su interior.

-aaaah... aaaah... Kai... Te amo... no te dejaré ir nunca, eres mi Alfa...- jadeó al sentir el líquido caliente en su interior y el cálido abrazo en que era envuelta. Se desplomó en la cama jadeando luego de sentir su propio orgasmo.

-hum... hum... te amo... te amo... te amo...- La menor se refregaba en la mejilla de la kumiho con ternura y devoción. Siempre había sido así desde que estaban juntas.- lo siento, mi amor... parece que nunca aprendo...

-Anudaste de nuevo en esta posición...- afirmó la omega con una sonrisa.

La bailarina solo asintió y sonrió.- lo siento...

-No lo controlas, mi vida. Esta bien... al menos estamos en la cama...- le contestó con gracia Ahri, girando su rostro para besarla.

-Te amo, Ahri... ojalá que esta vez... sea "la" vez...

-Yo también lo espero, nada me haría más feliz que cargar con tu hijo...-le dijo con una sonrisa, solo para dar paso al cansancio y quedar dormidas.

***

-Todo está mucho más tranquilo, ahora...- le decía un Alfa a otro en una esquina mientras fumaban y miraban a unas omegas que pasaron frente al bar donde paraban.

-Sí, desde la ascensión del nuevo Alto Alfa las cosas se han calmado bastante, era hora que alguien parara a Raven, era un hijo de puta...- afirmó el otro mientras saludaba con la mano a las chicas esperando que alguna se sintiera atraída a él.