Capítulo 34:Noche Luna Roja - Impulso insaciable

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Ese día en particular, Akali se había despertado extraña. Se sentía inquieta todo el tiempo con un hormigueo que le recorría todo el cuerpo. Intentó concentrarse en sus entrenamientos que había retomado cuando su herida había cerrado, pero su mente no se encontraba allí.

Se tiró en el mat totalmente agotada sin haber hecho demasiado, pero era de esperarse ya que su cabeza no estaba en el entrenamiento.

Intentó pensar que era lo que la tenía tan inquieta. No recordaba haber tenido esa sensación antes, por lo que le incomodaba bastante. No era la sensación de algo malo que iba a suceder, no era la sensación de estar en peligro, era algo más.

Algo que no podía descifrar.

Para su suerte, o mala suerte, se encontraba sola en casa ya que Evelynn se había ido temprano a su oficina a atender algunos asuntos de su empresa. Admiraba la capacidad que esta tenía de no solo ocuparse de sus negocios sino también de ser la Alta Omega de La Ciudad, algo que ella jamás podría hacer ya con su puesto era demasiado que atender.

La imagen de la diva se clavó en su cabeza y aumentó la sensación de incertidumbre. Primero pensó que algo malo le pasaría, pero luego se relamió los labios de recordar el sabor de esta en lo más profundo de su boca.

Se levantó y fue a tomar una ducha rápida para sacarse el sudor. Se cambió y se subió a su moto para ir a verla casi como un impulso indomable.

***

Nadie la había detenido porque todos sabían quien era Akali, la alfa de su jefa. Algunos se preguntaban por lo bajo que era lo que esta veía en aquella alfa ya que en comparación, se la veía algo menuda aunque esta fuese la Alta Alfa de la ciudad.

Por supuesto que todos sabían la historia detrás de los nuevos nombramientos pero aún así se preguntaban como había sido que el anterior Alto había perdido contra esa chica.

La ninja hacía caso omiso a los cuchicheos o las miradas inquisitivas que la apuntaban mientras caminaba hacia la oficina de su esposa.

Saludó a la secretaria personal con un movimiento de cabeza y continuó su camino.

-Señora Akali, espere. La señora Evelynn está...- la pobre chica no pudo ni articular palabra porque la alfa le hizo caso omiso y se metió en la oficina.

***

Evelynn había llegado temprano a la oficina ya que debía firmar algunos papeles y controlar algunos números, algo que al final de cuentas, le estaba tomando más tiempo del que había pensado.

Suspiraba cada vez que veía la pila de papeles que no disminuía. Tenía la esperanza de que iba a poder terminar a tiempo como para ir al penthouse y ver a Akali ya que se había ido antes de que esta se despertara.

Sin embargo, se sorprendió cuando la puerta de su oficina se abrió y la ninja se encontraba allí, pestañeó varias veces pensando que su mente le estaba jugando una mala pasada.

-¿Cariño?

-Eve...- le dijo con alegría de verla, cerrando la puerta con seguro detrás de sí. Se acercó a la omega quien se había levantado para recibirla con una sonrisa relajada ya que de verdad se alegraba de verla.

Recibió a la alfa en sus brazos con ternura.- ¿Sucede algo, cariño?

-Hum...- Akali suspiró al hundir su rostro en el cuello de su omega.- te extraño...- le dijo al fin siendo las palabras que más próximo describían sus sentimientos.

-Mi cachorrito...- le dijo esta con una sonrisa suave al abrazarla más entrañablemente y cubrirla con sus brazos.

-Mi dueña...- contestó abrazándola por la cintura pegándola a ella. No sabía que le gustaba decirle así hasta ese momento. Pero ningún título era tan cierto como ese, ya que Evelynn era dueña de sus fantasías, de su mirada, de su corazón y de su alma. No podía imaginarse sin la sirena de ninguna manera.

Almas Gemelas - OmegaVerse AkalynnOnde histórias criam vida. Descubra agora