Capítulo 82

790 68 11
                                    

Todo volvió a la normalidad, Hammerhead había sido derrotado y puesto tras las rejas. Parecía que la paz por fin volvia a la ciudad del amor. Claro, eso sería lo que muchos hubieran querido que pasara, pero en esta historia no todo es un arcoiris a la vuelta de la esquina.

Estaban nuestros héroes dentro del hospital, Adrien, Nino, Alya, May y el joven Miles estaban en una sala de espera. Peter era el único que no estaba ahí con ellos.

-Tom: ¡¿Donde está?! -entro de golpe

-Alya: señor y señora, Dupaing por fin llegan.

-Sabine: Alya, ¿Cómo está mi pequeña? ¿Está bien? -pregunto preocupada.

-Alya: señora Sabine... Yo... No sabría que decirle. Lo siento mucho. -bajo la cabeza muy apenada. May la tomo de los hombros apartandola con cuidado.

-Tom: ¿que han dicho los doctores? ¿ella se pondrá bien?

-May: aún no sabemos nada.

-Doctor: ¿familiares de Marinette Dupaing Cheng? -pregunto el doctor apareciendo por detrás.

-Sabine: aquí, somos sus padres. Dígame, ¿cómo está nuestra hija?

-Doctor: tengo que serles franco señora. Su hija está muy débil, por su condición, puedo inferir de que ella... -silencio un rato viendo a los ojos a ambos adultos.- esta en coma. Y existe la gran probabilidad de que no vuelva a despertar.

Todos los presentes quedaron shockeados de golpe.

-Alya: Ma-Marinette... En... No... No... -comenzo a llorar siendo abrazada al instante por Nino, quien también estaba llorando.

-Adrien: Maldición -desvio la mirada furioso golpeando con su puño la pared, aún así, la rabia no quitó la pena.

-Sabine: N... No, por qué mi hija... ¡¿Porqué?! -decia llorando, mientras era abrazada por May.

-Tom: mi princesita... Mi princesita hermosa... -llorando.

-Doctor: lo siento mucho.- se retiró en silencio.

-Miles: *sentido arácnido* ¿uh? -miro por la ventana

-Adrien: ¿que sucede, Miles?

-Miles: creí sentir la presencia de alguien. Al parecer me equivoque. -volteo de nuevo hacia la ventana, ya sabía que alguien estaba observando desde afuera.

Había pasado el rato, y los familiares de Marinette junto a sus amigos tuvieron que volver a sus hogares por órdenes del doctor. Este último estuvo sus últimos instantes, antes del cambio de turno, vigilando la habitación en la que estaba descansando Marinette. Cuando se marchó, Tikki no desaprovechó para mostrarse, y recostarse triste sobre el pecho de su amiga y portadora.

-Tikki: por favor... Perdoname Mari...

No habían pasado tantos segundo hasta que Peter llegó a la habitación, claro la hora de visitas se había acabado, pero las ventanas decían lo contrario. Tikki vio entrar a Peter con una mochila tras la espalda, éste ultimo no noto su precensia, aún así Tikki vio como el rostro de Peter estaba completamente petrificado.

-Spiderman: Mari... -se agacho para tomar su mano- ¿estás dormida? Jeje... Mal chiste, lo admito. Pero creo que si estuvieras despierta ahora, te hubieras reido ¿No?... Bueno, si es que no sigues enojada conmigo... Hmp. Bueno, creo que ya te moleste, lo siento... Fue muy bueno eh... Verte, y que no... Ya sabes, que no hayan mas conflicto entre nosotros, ¿Cierto?. -dijo sonriente pero nadie lo escucho, salvo Tikki.- bueno... Adiós My lady... Volveré. -dijo sacando de su mochila unas flores. -perdon si no se conservaron tan bien.  -salto por la ventana alejándose entre la luz de la noche. Tikki salió de su escondite.

-Tikki: si se conservaron muy bien. -vio las flores- Pero... ¿Donde dejó su sonrisa?

No tardo tanto como esperaba. Estaban las luces de su hogar apagadas, todo suponía a que estaban durmiendo. Subió por la pared, abrió la ventana para luego entrar a su habitación y terminar encima se de la cama.

-May: ¿dónde estabas? -pregunto encendiendo las luces.

-Peter: ¡Dios, May! ¿Que estás haciendo aquí?

-May: eso quiero saber yo ¿Dónde estabas? -pregunto molesta.

-Peter: pues, en la calle...

-May: Estuvimos en el hospital. ¿Porque no estuviste?

-Peter: estaba ocupado... -dijo desinteresado

-May: ¿Enserio, haciendo que?

-Peter: lo de siempre... tratando de proteger a la gente...

-May: qué raro. Por lo que vi en las noticias, no hubo incidentes de ningún tipo. Tampoco robos. Nunca vi un día tan pacifico desde que derrotaron a Hammerhead.

-Peter: bueno, hice lo que pude. -dijo  dandole la espalda a su tía, tomándole importancia a sus lanzaredes que tenía sobre el escritorio.

-May: Peter mirame... - el castaño se negó y siguió jugando con sus lanzaredes- ¡Peter Benjamin Parker, deja esas malditas cosas, y Mirame! -el castaño se dio vuelta su rostro estaba muerto, las lágrimas caían a chorros, todos entendían el porqué de dicha actitud.- ¿Pete, que ocurre?

Peter no dijo nada.

-Miles: estuviste con Marinette, ¿no es así? -interrumpio apareciendo.

Peter bajo la cabeza y asintió.

-Miles: entiendo. Es lamentable, aún recuerdas lo que pasó con Aurora, ¿cierto? -el castaño asintió nuevamente- puedo suponer de que el sacrificio de Beck, también te afecto -el castaño apretó el puño, tratando de aguantarse la pena.- aún sientes que podias haber hecho algo por Felicia, ¿no es así?

-Peter: y-yo... Ya...los perdí.... No quiero perderla a ella también ... -dijo cayendo rendido.

Su tía y su hermano le abrazaron, entendían que había pasado ya por mucho.

-May: está bien llorar. Tienes que sacarlo todo... ya todo estará bien.

-Peter: no quiero perderla... May, no la quiero perder también... No...

-May: ya está bien, Peter. Sácalo... Debes sacarlo, tenerlo dentro no te hace bien.

-Peter: ¡AHHHHHHHHH!

(Continuará...)

Miraculou's Spider-bug: Amor lejos de Casa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora