SO WHAT!
Remus Lupin ama a su hija con todo su corazón, pero cuando su esposa muere y su vida se desmorona ¿Cómo se supone que va a poder criarla?
Él la manda a un orfanato con la promesa de que va a volver....
¡SPOILER ALERT! lo hizo. Pero ya era...
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Un día paseando por Londres
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A la mañana siguiente, Lottie se despertó con los sonidos habituales de golpes y gritos.
Hizo una pequeña mueca de dolor, el delgado colchón en el que dormia se le clavo en la espalda y el delgado edredón apenas la mantuvo caliente en la fría noche inglesa.
Ella mira a su alrededor, la mayoría de las chicas ya se habían ido pero Kaycie dormía pacíficamente. Charlotte siempre se pregunto como esa chica podía dormirse tan fácil en un lugar tan ruidoso, pero ella nunca se lo preguntó.
El reloj en la pared marca las 6.30 am y Charlotte puso los ojos en blanco.
Ella odia las mañanas.
Sabiendo que no va a poder volver a dormir, la joven Lupin se levanta perezosamente haciendo su camino hacia su mochila para sacar unos leggings y una sudadera.
Se dirigió al baño, sus suaves calcetines hacian que sus pasos fueran silenciosos, Lottie agradecía eso.
Después de cambiarse Charlotte bajo las escaleras hacia la sala de estar. Ella sabía que alguien debía darles de comer a los más chicos, ella se preguntaba si alguien los alimento apropiadamente en lo que va del año. Esa era probablemente la única razón por la cual ella odiaba dejar el orfanato.
"Lottie" la niñas mas chicas chillaron, sus ojos estaban llenos de emoción mientras la miraban.
"Hola chicos" Charlotte saluda con su mano, con una sonrisa en su rostro "¿Quién quiere desayunar?"
Todos los niños se alegran mientras ella asiente "entonces denme un minuto"
Ella fue a la cocina, agarró un pedaso de pan y la manteca. Empezó a hacer tostadas, sin darse cuenta del chico mayor que la miraba.
Bueno, eso fue antes de que el ponga su mano en su cintura.
Charlotte se removió ante el toque inesperado, apartándose del chico de dieciséis años.
"¡Pero que mierda!" Ella siseó, apartando su mano de un golpe.
"Buenos días Lupin" el chico más grande, Tommy, sonríe.
"Vete a la mierda, Fletcher" ella pone los ojos en blanco.
"¿Cómo va el internado? ¿Ya se aburrieron de ti?" Pregunta, apretando su mano en su cintura otra vez.
"Vete a la mierda" ella repite mirando al chico, quién lo único que hacía era bajar mas sus manos por el cuerpo de ella.
"No creo que yo-" él fue cortado por el sonido que hizo la puerta principal al ser abierta. Tom dio un paso para atras, con sus ojos fijos en la puerta.
