Miré a Ryujin mientras le pasaba las tijeras para comenzar a cortar el cabello del perro. Ya llevaba 3 días con el gato.
–Bien, no es un gato problemático, es muy tranquilo y cariñoso, note que le gusta dormir en la silla de mi escritorio frente a la computadora.
–Es un buen gato.
–Lo es.
Al llegar a la puerta de la casa, mire por la ventana a Chan sobre el sillón acostado, enfrente de el había un gato, sobre el borde de la ventana, lo había visto pasar ayer frente a la casa también. Me acerque al gato y sonreí. Era un gato muy lindo tricolor con ojos verdes.
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Llamé al gato y este volteó a mi dirección, bajándose de inmediato y yendo hacia mi.
–Hola lindo.– sonreí agachandome para mirar al gato, el felino al llegar frente a mi frotó su cuerpo por toda mi pierna, brazo y manos, dejándose mimar mientras soltaba dulces maullidos. –Eres adorable, pero debo entrar a casa, te veo luego.
Acaricié por última vez al felino y entre a casa. Al entrar fue Chan quien esta vez llegó hacia mi y frotó su cuerpo contra mi pierna.
–Hola Chan.– sonreí al gran gato gris y lo acaricié, me senté en el sillón y este subió hasta acostarse a un lado de mí recargando su cabeza en mi pierna, dejando ser el objetivo de mis manos dando pequeñas caricias.
Solo habían pasado tres días, pero realmente me gustaba mucho la compañía del gato. Era lindo y agradable, muy obediente y limpio también, me encariñe con el rápidamente.
🐈🐈
La semana paso bastante rápido, todos los días miraba al gato tricolor frente a la ventana mirando a Chan, una vez lo miré adentro de la casa, parecía que entró por la ventana. Fue todos los días, llegué a la conclusión de que no tenía dueño.
–¿Crees que sea buena idea?.
Acomode los costales y las bolsas con alimentos para animales y fuí a lavarme las manos.
–Chan es un gato tranquilo, y dices que siempre está frente a el afuera de la casa, yo creo que está bien.– Ryujin sonrió y asenti mientras tomaba un juguete para gato. Bueno, mejor llevo dos.
Me encanta trabajar en una veterinaria, yo solo me encargo de vacunas y chequeos por la mañana, Dowoon por la tarde, Ryujin de la estética y Jaebeom de las operaciones, pero él solo viene cuando tiene una operación.
–Nos vemos mañana Ryujin.– tomé mi bolso y lo coloque en mi hombro despidiéndome con la mano cuando mi trabajo terminó. Escuché a la mayor despedirse y salí, a dos cuadras mire a Dowoon caminando para comenzar su trabajo y nos saludamos. Llegué a casa y como todos los días ahí estaba el gato en el borde de la ventana.
–Hola pequeño.– llamé y el felino fue hasta mí por la dosis diaria de mimos que había estado recibiendo de mi parte cuando llegaba del trabajo. –Parece que necesitas un hogar, puedes quedarte conmigo.– abrí la puerta de mi hogar y el gato se quedó mirándome sentado, Chan llegó a la puerta y se acostó en el suelo mirándonos. –Ven aquí, puedes entrar.– el gato entró a la casa y Chan lo miro, este frotó su cuerpo en el de Chan y luego en el mío. Cerré la puerta y sonreí por la imagen frente a mis ojos. –Chan, el será tu nuevo hermano, se quedará en casa contigo a partir de hoy, bienvenido..
Ahí me di cuenta de algo, él no tenía nombre. Miré alrededor buscando inspiración para el nombre del gato. Busque en internet algún nombre y a pesar de que tal vez solía verse mucho este nombre en gatos, realmente sentí que le quedaba bien.
–¿Te gusta Felix? Ese será tu nombre, Felix.
El pequeño soltó un largo maullido dulcemente y fue con Chan. Me sentía emociónada por el nuevo gato.
