Capítulo 10: Éxtasis

277 16 1
                                    

Este amor es como un negocio

Podría volvernos locos a ambos
.
.
.

Con sus dedos comenzó a delinear mis labios, bajando a mi clavícula, pasó por en medio de mis pechos y llegó hasta mi abdomen. jugó un rato en esa parte mientras yo acariciaba sus piernas

regresó a darme un lento y húmedo beso, volvió a sentarse, vi como sujetó su ropa para empezar a quitarse la blusa, al ver lo que iba a hacer rápidamente me senté y tomé la prenda por los costados deteniendo su acción. me quedó viendo con una ceja alzada

—¿No quieres que me lo quite? —negué

—Permítame ayudarle —use un tono que hizo que soltara una risita

—Cuanta amabilidad

—estoy para servirle — río y alzó sus brazos

—Entonces, espero haga bien su trabajo

—Prometo no decepcionarla — le quité la blusa delicadamente. Observé su hermoso y escultural cuerpo, mis manos empezaron a delinear sus perfectas curvas — Mina, Eres tan hermosa— le dije mirándola a los ojos. 

Vi cómo se sonrojó ante mis palabras y entonces la besé sintiendo como se entregaba a mis caricias viendo este momento como mi turno.

En estos momentos sus labios eran completamente míos y yo aprovecharía eso. Mi lengua entró sin miedo a su boca mientras ella rodeaba mi cuello con sus brazos y yo la pegaba a mi sintiendo la calidez y suavidad de su piel chocar con el mio. Acaricié su espalda y mis besos se fueron a su cuello, escuché sus suspiros mientras acariciaba mi cabello.

La sujeté de la cintura mientras con mi boca fui recorriendo sus hombros y bajé por su clavícula delineando con mi lengua esta. Mis manos empezaron a subir por su estómago acariciando lentamente esa parte. Tenía un estómago muy bien definido y lo diminuta que era su cintura hacía que mis agarres fueran más fáciles. 

Jugué con sus costillas hasta subir a su sostén, masajee sus pechos delicadamente por encima de la tela y sentí como ella hizo su cabeza hacia atrás sosteniéndose de mi, su respiración era agitada

 sin hacerla esperar más bajé la tela y reposé mis labios en uno de sus pezones, empecé a jugar con este lamiendo y mordiendo mientras masajeaba el otro sintiendo como estos ya estaban sumamente duros por la excitación.

—Quítatelo— le susurré al oído y ella me obedeció dándole una mejor entrada a mi boca para poder darle más placer, intercalando mi atención en ambos. Su piel era tan tersa, tan suave. Sumamente exquisita

—Ah, Chaeyoung—se sujetó de mi cuello entregándose completamente

escucharla gemir mi nombre erizó mi piel y golpeó fuertemente mi centro

cada sonido que provenía de su boca era mágico

me separé y la recosté quedando encima de ella mientras la besaba y acariciaba sus pechos. Me tomó de las mejillas y pude sentir como la punta de sus dedos estaban fríos, tomé sus manos y fui besando cada uno de ellos, introduje la punta de cada uno en mi boca para que se calentaran mientras ambas nos mirábamos

—me gusta tu sabor—le dije una vez terminada mi atención en ellos

—espero te gusten también otras partes — me sorprendí de sus palabras y ella carcajeó 

Cuando pensaba que no podía estar más excitada ella venía y decía cosas como esas haciéndome sobresaltar

Una vez que solté sus dedos llevó sus manos a mi espalda, acariciando esa parte con sus uñas. Se dirigió a mi sujetador y lo quitó. 

EL VIAJE (MICHAENG)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora