𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 5- Una Propuesta

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El celular de ella cayó al suelo tras soltarlo de sus manos y después llevarlas a su corazón

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El celular de ella cayó al suelo tras soltarlo de sus manos y después llevarlas a su corazón.

Los hijos de Shinjuro estaban frente de ella. El mismo Kyojuro y Senjuro  Rengoku. Uno de sus amigos más importantes de su universidad y de quien compartían apellidos, y el hermano de el, a quien quería mucho como si de un pequeño hermanito suyo se tratara.

— ¡Ey, cuanto tiempo Mitsuri!, créeme que me fue muy difícil buscarte por todo Londres, era difícil conseguir el número de tu madre y las...

Y ella se acercó hasta el para abrazarle repentinamente.

Desde que se fue de su universidad, no volvió a ver a ninguno de sus compañeros y a pesar de que había grandes probabilidades que con Kyojuro cruzarian caminos, el destino no los coincidía.

— Tanto tiempo sin verte Mitsuri.

Le dio unas suaves palmaditas en su espalda, dejando que le abrazara.

Aunque a Kyojuro le resulto extraño que no llorara... Su amiga era muy sentimental y juraba que cuando lo viera a él con su hermano, derramaria unas cuantas lagrimas.

— Me causa tanta alegría verles.. Aunque no esperaba que me buscaran.. ¡Pero mira nomas, cuanto has crecido mi lindo Senjuro!.

Y se agacho a su tamaño, tomándole de las mejillas para darle un beso en su frente, dándole un abrazo, acercandolo a su pecho.
Lo único era que sus hermosos ojos verdes eran cristalinos, como si quisiese llorar.

Pero no lo hacía.

— Dios, amo a los niños y aunque estés grande ya, eres un niño para mi..¿Como has estado?, ¿comes bien?, ¿tu hermano te cuida como se debe?. Catorce años y tu rostro es de un bebé.

El menor se sonrojo al instante, pero le gustaba mucho la cercanía de ella con el. Su olor era tan dulce y podía escuchar con perfección los latidos rápidos de su corazón.

— Mi-Mitsuri, yo-yo te extrañe mucho.

Comenzó a llorar el pequeño, acto que le pareció demasiado dulce a la chica, dándole aún más mimos y acariciando su cabello con suavidad.

Kyojuro observaba detalladamente a Mitsuri, vaya que tenía un ligero cambio.

La chica había cortado un poco su cabello y esta vez no portaba las trenzas que usualmente solía usar.

Llevaba un flequillo diferente, aparte de que ahora era lasio su cabello, cuando antes era ondulado. Le veía más delgada del rostro y cuerpo, pero mantenía su figura tan escultural.

— ¡Mi hermano me cuida muy bien!, ¡y siempre me hace galletas así como tu solias hacerlo!, ¡tengo muchas cosas que contarte Mitsuri!

— ¿De verdad?, ¡oh, me encantaría escucharte hasta el último aliento!, aún no puedo creer que dieran conmigo, no esperaba esto. ¿Nadie más lo sabe, verdad?

Obamitsu- Nos Volvimos A Encontrar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora