CAPÍTULO DOS

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Felix no sabía que hacer, tenia miedo y mucho miedo, no tan sólo por tratar con alguien con trastornos mentales sino, que no sabia prácticamente nada de ese chico, y tampoco sabia nada, pero absolutamente nada sobre psiquiatría.

Felix se quedó esa noche con un mal sabor en la boca, llegó a su departamento a las siete de la mañana con lágrimas en sus ojos, mezcladas con miedo y desesperación.

En pequeñas palabras; Felix era una carnada fresca para ese tal Seo Changbin.

Seungmin se apresuró a la puerta por el toque y el movimiento de las llaves de su departamento, se quedo quieto al notar que era Felix, se acercó a él para abrazarlo como cada vez que llegaba, se detuvo en seco notando los ojos rojos y las lágrimas en la cara de su amigo.

--¿Que sucedió Lix?--ahora si tomo la iniciativa, ya en sus brazos Felix empezó a hipar más.

--Seungmin...Me transfirieron a un psiquiatra--Seungmin se heló un segundo, acerco sus manos a las mejillas del rubio limpiandolas.

--¿Tiene algo de malo?-- preguntó a lo que Felix abrió los ojos como platos.

--Seungmin yo soy enfermero--se sentó en el sillón terminando de limpiar su cara--no soy psiquiatra--sacó de su bolso el sobre negro, extendiendo sus manos con este a Seungmin--y esto es lo peor-- nuevamente sus lágrimas amenazaron en salir.

Seungmin tomo el sobre, lo abrió y empezó a leer con calma, sus ojos se abrieron como platos cuando estos vieron el apellido "Seo"

--¿Seo?--pregunto para si mismo, hasta que su cabeza prendió un interruptor, miró a Jisung con lastima, ya sabía porque se había puesto así.

--Felix re...--las palabras de Seungmin se vieron cortadas por el timbre de la puerta.

¿Quién podría tocar a las 7:33 A.M?

--Yo abro--se levantó del sofá, miró por el hoyito de la puerta encontrando a su padre del otro lado, quitó los seguros y abrió--¿Qué quieres?--su padre lo miro sorpresivo aunque luego se convirtió en una sonrisa.

--Recoge tus cosas, Seo Changbin te espera--Felix tembló y su padre lo notó.

Sin esperar invitación, entro al departamento saludando a Seungmin. Felix tomó su bolso y se despidió de Seungmin con un abrazo.

Seungmin se sentia mal por su amigo, ni siquiera termino de decirle lo que debía.

Te darás cuenta luego...

Seungmin se sentó pensando en ese apellido... Lo había oído antes, pero no secordaba de quien o donde.

El rubio respiraba asustado, sus manos temblaban demasiado y estaba cerca de tener un ataque si no se devolvía.

--Calmate, ¿Quiéres?--dijo su padre sin despegar la vista de la carretera solitaria.

El Psiquiátrico CARAT quedaba fuera de la ciudad, por el hecho de que supuestamente así los pacientes que se escapen no llegaran lejos por el espeso bosque.

Patrañas. Pensó Felix a la tonta explicación de hace unos minutos de su padre.

El sonido de unas rejas lo llevó devuelta a la realidad, sus nervios estaban a flor de piel.

El gran portón negro con algo de óxido y el gigantesco edificio algo descuidado le provocó un escalofrío, si, Felix estaba apunto de hacer una tontería.

Salió del auto corriendo a la reja, un grave error; solo al poner su mano un choque eléctrico recorrió todo su cuerpo.

--¡Mierda!-- gritó sobando su mano que ahora presentaba una quemada.

--Comportate Felix-- lo tomó del brazo con fuerza, conduciéndolo al edificio.

Un lugar totalmente aterrador y lo fue más al entrar, el lugar estaba medio vacío. Habían enfermeros y pacientes en los pasillos, unos gritaban y otros se quedaban como estatuas.

--Solo sigues adelante y no hagas contacto visual-- dijo su padre ya soltando el brazo del rubio--Vamos al segundo piso.

Se dirigieron a las escaleras principales las cuales estaban demasiado feas y descuidadas, el mármol fino ahora parecía piedra mal pulida.

--Este lugar era mas lindo--su padre estaba delante de el, Felix veía por la ventana gigantesca, algunas estaban rotas y le daban mala espina porque...Tenían sangre-- Había más personal, nos dedicabamos más a nuestra profesión--llegaron al pasillo y su padre miro el lugar con lástima.

Era muy dificil ver con claridad, estaba un poco oscuro, el rubio pudo divisar a pacientes en los pasillos, sentados en el piso; unos estaban con su cabeza en medio de sus piernas y otros sólo estaban ahí.

--¿Por qué cambió tanto?--preguntó con miedo, seguía apegado a su padre como un niño pequeño.

El adulto se detuvo frente a una enfermera, Felix la miró de forma calmada, se veía cansada y estaba desaliñada como quien dice; parecía un zombie.

--Señor Lee...--la enfermera miró al padre de Felix y luego a el-- El paciente esta...--la enfermera empezó a llorar, asustando a Felix.

Felix pudo notar como su padre se tensaba, volviendo su mano un puño cerrado, el mayor se volteo a ver a su hijo, tomo su brazo y se dirigió a la puerta.

--No se preocupe-- el hombre miró a la enfermera antes de entrar a aquella habitación con el asustadizo de Felix--No te muevas de aquí hasta que yo te diga--susurro su padre en el oído del menor, quien lo veía con miedo.

El mayor se acerco al único chico presente en esa cafetería, Felix veía muy fijo el suelo, no quería mirar.

--Hola, Seo Changbin--habló el mayor, tranquilamente se sentó al frente del  ojinegro, quien no le prestó atención a su presencia porque estaba concentrado en su lectura--¿Cómo va tu libro?--preguntó con una sonrisa.

--Muy bien, gracias por preguntar--el ojinegro dejó el libro de lado, cerrándolo con delicadeza--¿Y usted cómo esta?--le sonrió.

Felix subió su vista en el momento que su padre dijo Seo Changbin, su corazón iba a mil por hora, jugaba nerviosamente con sus manos, ellos dos tenían una conversación normal y sencilla, algo que le pareció raro.

--Seo, quiero presentarte a mi hijo--el hombre movió un poco su cuerpo para hacerlo selas a Felix con sus manos, el de pecas se sentó al lado de su padre con miedo--presentate--su padre miraba a su hijo con ojos que decían algo como: <<relajate por favor>>.

Felix extendió su mano temblorosa hacia el ojinegro, quien la miró un segundo y luego la tomo con delicadeza.

--Lee Felix--intentó hablar lo más claro posible, algo fallido porque Changbin lo miro entrecerrando los ojos.

--Seo Changbin--dijo con la misma sonrisa desde el inicio.

Felix soltó su mano, Changbin observó ese acto sin ninguna expresión en su rostro.

--fue un gusto conocerlos--Changbin se levantó y fué guiado por tres enfermeros a su habitación.

--No te rebajes mucho--su padre lo observó tan frio--Felix, debes aprender a diferenciar sus caras--el nombrado abrió los ojos como platos.

--¿C-cómo?--habló entrecortado--pero...Su informe médico solo decía Psicopatía--la pensó un segundo recordando el tacho de la hoja con tinta roja, no se leía la enfermedad a decir verdad--¿había algo mas?--tragó duro al ver que su padre asentía.

--Felix, Changbin tiene...--se sentía presionado, no quere decirle.

--Dime--Felix se estaba asustando--¿Qué tiene?

--Trastorno de identidad Disociativo--el mayor
posó su mano en el hombro del menor, sin embargo Felix arruga el ceño en señal de no entender--pero no es normal Felix, el es uno de los casos más negativos.

--¿Por qué?--preguntó el rubio, su padre lo miró con tristeza.

--No te puedo responder eso...Lo siento--se levanto dejando a Felix sólo, o eso pensó.

Dos enfermeros aparecieron inyectando algo en el brazo del desprevenido que cayó como pluma.

𝐓𝐨𝐨 𝐌𝐚𝐧𝐲 𝐅𝐚𝐜𝐞   •𝙲𝚑𝚊𝚗𝚐𝚕𝚒𝚡•Where stories live. Discover now