Capitulo 1

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Es tarde y me encuentro sentado en mi oficina observando la ventana bebiendo una caliente taza de café, la acerco a mis labios para darle un pequeño sorbo, la saboreo para después soltar un suspiro, estoy cansado. Con mi mano toco mi cuello y inclino un poco mi cabeza para así hacerlo crujir y así sentir satisfacción y menos tensión, hoy fue un día muy pesado. Escucho un sonido familiar y me doy cuenta que proviene de mi teléfono, me dirijo hacia el para ver que es y es un mensaje, ¡fabuloso! es el que siempre espero~

Salgo de mi oficina sin importarme nada, agarró las llaves de mi auto, cierro mi oficina, y salgo de ahí. Deje algunos cagones abiertos, muchos papeles en el suelo, además de un largo trabajo que me toca entregar mañana, pero no importa, ella me necesita. Bajo hasta el sótano donde queda el estacionamiento y me subo a mi auto y llego al lugar donde siempre nos encontramos. El cielo ya se encuentra oscuro, la noche se ve igual de bella como lo es ella, la emoción me quema. Entro y pregunto por ella, me dicen el número de su apartarme aunque yo ya me lo se de memoria, solo lo haga para guardar las apariencias, subo al ascensor y marco su puerta y está de inmediato se abre y la veo a ella, la veo de arriba abajo, se ve hermosa con ese vestido azul, me acerco con tranquilidad a ella y la veo a la cara, puedo notar en sus ojos que a estado llorando, me invita a que cene con ella algo delicioso que a preparado y con mucho gusto acepto y así es como caigo de nuevo.

...

Al encontrarnos sentados juntos en la mesa ella me empieza a relatar que le pasa. La escucho, la aconsejo, y aprovecho el momento para comentarle la petición que siempre le hecho, observo su rostro y la veo bufar, se levanta con brusquedad y empieza a recoger los platos y se los lleva para empezarlos a limpiar. Desde la mesa la observo, su cuerpo me estimula pero también noto que está tensa, a pasos lentos me le acerco paso a paso hasta quedar pegado al cuerpo de ella, escondo mi cara en su nuca, le empiezo a susurrar cosas al oído, con caricias sucias, le pido que deje de hacer eso, ella voltea, me mira a los ojos con profundidad, me da miedo, se ríe y me besa, me encanta su actitud bipolar, jamás voy a admitir que me vuelto un masoquista a cualquier acción de ella. El beso se vuelve profundo, puedo sentir como me lo da con amor, se empieza a rotar caliente y húmedo, me muerde el labio inferior hasta romperlo y envés de causar dolor me a producido una erección, le pido que entremos a la habitación, ya no aguanto más, ella se sonroja y acepta, siento que estoy alucinando.

...

Al llegar a la habitación ella se torna algo nerviosa, eso me gusta, me llena de adrenalina, meda oxitosina, me vuelve salvaje, siento que ella es mi presa aunque la realidad es al revés y eso me produce aún más dopamina. La despojo de su ropa hasta la última prenda, ella hace lo mismo conmigo con mordidas y caricias en toda mi piel, vamos lento con cariño, la intensidad sube ella me dice que no aguanta más y le hago el amor en una cama que no es de nosotros.

...


Ya es media noche y ella se encuentra arriba de mi pecho desnuda después de hacerlo varias veces cumpliéndole sus fetiches y fantasías, y yo como buen cabrón no me puedo negar a ninguna, la realidad es que eso me encanta de ella, me excita~ y de solo recordarlo me hace querer repetir ese momento aunque ya estoy cansado, ella es toda una leona, mi leona… Veo el cuarto a mi alrededor y está desordenado, al echar la vista en el suelo veo sus pequeñas bragas tiradas, una pequeña sonrisa hilarante se implementa en mi rostro al recordar como fue que llegaron ahí, pero mi sonrisa se elimina al ver el closet y lo observo llena de ropa de hombre que no es mía, mi rostro cambia y empiezo a sentir dolor aunque no tengo ninguna herida.

-Es de el, igual que ella. -La abrazo y la pego más a mi.

El sol me quema en la cara y siento fuertes golpes en mi espalda, escucho a Kohaku gritar en susurros, tengo sueño mejor sigo durmiendo, me agarra de los hombros y me levanta y me tira mi ropa en las manos y escucho el sonido de la puerta, llego su esposo. Como puedo me pongo el pantalón y recojo mi cosas para que así no quede evidencia o sospecha que yo estuve hay, soy un secreto~ tengo mi cosas en la manos y ella me empieza hacer gestos para que la siga, la sigo y me lleva a la puerta de las escaleras, estoy cansado de está rutina. La miro y veo que está nerviosa, la llaves de la puerta tiemblan en sus manos, su pulso debe estar acelerado, la veo sudar frío, me abre y me dice que me valla, no se por que si no es la primera vez que pasa esto me duele.

Ya tengo un pie afuera y veo como ella se prepara para trancar la puerta, no puedo, no lo soporto, empujo un poco la puerta dejo mis cosas caer al suelo pero... La tomo del rostro y lo acerco al mío para así acercar nuestros labios y darle un profundo beso. En el siento amor, es reconfortante.

Después del beso ahora si que es hora de irme, ella cierra la puerta, yo recojo mis cosas del suelo y me termino de vestir, ahora ella juega su papel de esposa feliz, y a mi solo me toca buscar la manera de salir de manera desapercibida para que no inicie algún rumor.

...


Ya salí de su edificio ahora me encuentro conduciendo hacia mi trabajo pensando, ¿por que llevo seis años con está rutina? estoy cansando, aunque siempre pase lo mismo, igual me duele, me duele ver como ella me saca a escondida o a patadas de su apartamento por que soy solamente su maldito amante, el cual la ayuda y le da cariño cuando aquel imbécil la destruye y al final ella me esta destruyendo a mi, por que en su vida soy solo el “otro” pero igual siempre termino detrás de ella, me siento utilizado, es mi mal habito…


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Malos hábitosWhere stories live. Discover now