El cepillo colgate 360 y tú

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Advertencia: el capítulo contiene escenas sangrientas.

Narrado por colgate 360 limpiador de lengua y mejillas:

Al llegar el amanecer me acerqué al baño, mirando lo que tenía preparado.

Dos cuchillos que había conseguido gracias al poco ki que me quedaba, los palillos muy necesarios y el traje de los rojitos de Among Us.

Sonreí, no solo saldría de aquí con T/N, también obtendria mi venganza por todo lo que me había hecho Doki en el pasado.

Escuché el audio de las campanas y regresé a la habitación, mirando las cámaras. Doki vendría en cualquier momento para tratar de llevarme a mi libro, pero no dejaría que eso pasara.

Me senté en el suelo y miré a T/N en la otra habitación.

—Lo siento por esto.

Suspiré, tendría que ser duro con esto si quería sacarnos de aquí. Miré la puerta abrirse y luego entró Doki, entonces yo me levanté.

—Con qué copiando los trajes del juego del calamar, con razón Peppa te reemplazó.

Le dije, antes de ir contra Doki y rodear su cuello con mis brazos, presionando el filo del cuchillo contra su yugular.

—¡No se me acerquen malditos raritos!

Grité a los rojitos que ya estaban intentando atacarme con sus armas. Yo quité el arma de Doki de su cinturón y comencé a disparar el cristal de la habitación de T/N, entonces logré hacer un pequeño agujero.

—¡El código es 080926!

Le grité, antes de apuntar a esas máscaras con figuras geométricas y disparar, yo no dudé al momento de cortar el cuello del maldito sarnoso y patear su charco de sangre, empujando a uno de los guardias para utilizarlo de escudo humano.

—Claro, activa esa mierda.

Me reí en la cara del puto cuadrado que no dudó en prender las alarmas, yo llevando la punta de la pistola a un lugar más abajo de su abdomen.

—Me la pelas, cuadrado rarito. —terminé disparando el pene del sujeto y luego sus dos pantorrillas, si sobrevivía lo dejaría incapacitado.

Cerré las puertas y luego miré a Doki, no sabía cuál era la fuerza que evitaba que pudiéramos hacer esto a un estilo más de Wattpad y usar nuestros poderes.

—¿T/N?

Miré a t/n horrorizada intentando colocar el código de la puerta, yo suspiré y apunté a los cables sueltos de la cámara de seguridad, disparando una vez ahí y otra sobre la puerta eléctrica, escuchando el apagón que había ocasionado, de esa manera t/n lograría salir fácilmente.

Me encargué de disparar de nuevo contra Doki, agachandome y tomando sus orejas para levantar su rostro ensangrentado.

—Hola, barbudo —presione mis uñas sobre su cráneo, me sentía aliviado de al fin haberlo asesinado— infeliz, maldito pedazo de mierda repugnante e inmunda, das asco.

Lo solté y lo seguí pateando hasta que los guardias entraron, yo me mordí los labios y recargue las balas antes de comenzar a disparar como loco hacia todos los rojitos, saliendo de la habitación al pasar sobre sus cadáveres.

Miré a la izquierda, t/n estaba muy nerviosa y no se movía, así que tuve que cargarla de la cintura y ponerla sobre uno de mis hombros, comenzando a correr a la salida con el arma frente mío.

—¡Te sacaré de aquí!

Grité, el ruido de las alarmas era demasiado fuerte, y por un momento creí sentir algo explotar en uno de mis oídos, cual empezó a sangrar considerablemente hasta mi cuello.

Bufé y escuché unos disparos hacia nosotros, teníamos la ventaja de ambos ser t/n, ellos no podían matarnos por ser protagonistas de dos libros, porque sin nosotros la historia acabaría y la maldita empresa del difunto de Doki se iría a la quiebra.

Seguí corriendo y miré la pared a la que nos había llevado, yo suspiré e intenté concentrarme, sintiendo mi ki y luego bajando a t/n de mi hombro.

Abrí los ojos en grande al notar sus dos orejas sangrar, me mordí los labios y le di un abrazo.

—Disculpa por lastimarte.... —le dije, separandonos luego y mirando a los costados por escapatoria, hasta que conseguí la salida; eran unas escaleras. Golpeé la puerta con el cartel cual no leí y logré romper la porquería, tomando a t/n nuevamente para comenzar a subir.

Comencé a correr, no había cerrado la puerta y podía oír disparos junto con las pisadas de los sujetos comenzando a subir también, nos perseguían.

Al llegar miré todo rápidamente, estábamos arriba de un edificio tan grande casi como la casa de t/n, entonces intenté hacer aparecer algo y lo logré, al parecer aquí no llegaba su sistema que inhabilitaba nuestras habilidades. Sonreí antes de empujar a t/n del edificio y luego a mi, para cuando ellos lograran subir del todo t/n y yo ya estaríamos corriendo.

—¡T/N, activa tu modo de combate 16!