—Tengo algo importante que contarte. — suspiró antes de soltar la bomba. —Soy una bruja.
Su tía empezó a reír pensando que era una broma pero luego paro recordando que Mia nunca bromeaba.
—Eso no existe linda… ¿Verdad? Dime que no por favor — Mia suspiró antes de levantarse de su lugar y hacer el pequeño truco de la plumas que Bonnie le enseñó.
Sacó las plumas mientras su tía protestaba y se concentró. En un momento a otro las plumas volaban al rededor de ellas dos.
Abrió los ojos para encontrar a una Jenna en estado de shock.
Supiro mientras se sentaba de nuevo. Este sería un largo día.
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—Esa es la razón por lo que termine con Matt—dice Caroline a su mejor amiga.
—¿Por qué sólo no le dices?, sabes que las mentiras no llegan a ningún lado. Además si el te ama, te amara como eres. — le recuerda, pero ella niega.
—No quiero volver a lastimarlo, no me perdonaría si la próxima vez lo mato— susurra para que nadie las escuche.
—Ven a mi casa hoy, tía J, hará barbacoa ya sabes lo que dicen. La comida alegra el alma.
—Si, esta bien. Pero te veré allá, tengo algunas cosas que hacer— dice y Mia asintió.
Se despidieron y Caroline se va. Ella toma sus cosas y Mia hace lo mismo. Cuando está a punto de salir del grill se encuentra con Damon.
—¿A donde vas? —pregunta el sonriendo.
—¿Me estas siguiendo?— ignora su pregunta.
—Aunque eres algo lindo de vigilar, no eres lo único en lo que me intereso— sonríe—. Vine a comprar un pastel de durazno.
—No me gusta el pastel de durazno— hace una mueca.
