𝙏𝙚𝙚𝙣𝙖𝙜𝙚𝙧𝙨. || 𝗖𝗼𝗯𝗿𝗮 𝗞𝗮𝗶. ✔︎

𝗙𝗨𝗧𝗨𝗥𝗔 𝗖𝗔𝗠𝗣𝗘𝗢𝗡𝗔.

UN DÍA RELAJADO, era todo lo que Josephine LaRusso quería después de tanto drama. No había rastro de su hermana en casa, así que bajó las escaleras esperando encontrarla.

—–Buenos días, cielo. —saluda Daniel al ver a su hija.

—–Buenos días, papá. —sirviéndose una taza de café.

Josephine y Daniel aún no arreglaban su problema, y aunque Daniel intentaba hablarle como si nada para relajar la tensión, Josephine no parecía querer intentarlo. Y es que le parecía irónico estar molesta con su papá por entregar a Robby, y ahora él y ella ni siquiera se dirigen la palabra.

—–¿Tienes algo que hacer hoy?

—–Tarea. —bebe de su taza. —–No lo sé, tal vez más tarde haga compras de navidad.

—–Ven conmigo a dejar algunas cosas al dojo, me gustaría que hablemos. —pide. Pero en cuanto ve la cara de Josephine, la interrumpe. —–Por favor, Jo.

—–Está bien. —suspira.

Josephine termina su taza de café en lo que Daniel toma las cosas que llevaría. Ambos se suben al auto del ex campeón, y comienzan su camino.

—–Recuerdo cuando Sam y tú eran pequeñas, ambas entraban en el asiento de copiloto, mamá se volvía loca, peeo luego se enternecía de verlas a ambas aplastandose. —sonríe. —–No sé en qué momento crecieron, pero estoy muy orgulloso de las jovencitas en las que se convirtieron.

—–Pareciera que fue ayer. —responde Jo. —–Cuando mamá lograba vestirnos igual, o cuando éramos tu mini versión.

—–¿Sabes, Jo?, tu y yo somos muy parecidos, y no físicamente, eres hermosa igual que tu madre. Pero entre mis tres hijos, tu eres la que mas se parece a mi, y es por eso que te cuido tanto. —suspira. —–Y siento que lo he hecho todo mal contigo, creía cuidarte, pero en realidad te estaba deteniendo en el proceso de encontrarte a ti misma. Y cuando lo mencionaste ayer, me abriste los ojos. He estado siendo un mal padre.

—–Papá no... Eres un gran padre, solo que comenzamos a no entendernos, y es normal, estoy creciendo y tampoco he puesto de mi parte. —le dirige la mirada. —–He estado dentro de mi propio mundo, que olvidé que tenía uno hace mucho tiempo.

—–Era cuestión de tiempo para que eso pasara, Jo. No ibas a ser una niña toda la vida. Y lo acepto, solo quiero que seamos tan unidos como antes, que me dejes cuidarte... Aunque bueno, has demostrado poder defenderte tú sola. Independientemente de todo, ví los vídeos de la pelea, y eres increíble, cariño.

—–¿De verdad lo crees? —pregunta con una sonrisa.

—–Por supuesto que lo creo, siempre creí en ti, de cualquier forma. Por eso me asustaba que entraras a Cobra Kai, porque no quería que Johnny o John Kreese intentaran aprovecharse de tu habilidad.

—–El sensei Lawrence siempre intentó cuidarme de John Kreese, por mi... Por mi...

—–¿Por tu problema de control? —Josephine lo mira sorprendida. —–Lo sé, siempre lo supe, yo lo controlaba, el señor Miyagi lo notó en ti desde el primer día de tu entrenamiento, era un hombre mayor pero nunca dejó de ser inteligente. Me enseñó muchos métodos de control, y es por eso que jamás tuviste un descontrol, hasta que entraste a Cobra Kai.

—–Papá... ¿Es por eso que estuviste tan molesto cuando empecé a entrenar ahí?

—–Mas que molesto estaba preocupado, pero no quise mencionarlo para no preocuparte a ti.